Un guiño a la cocina internacional, en el Marengo de Zaragoza

Desde hace apenas unos meses, un nuevo concepto de restauración se ha instalado en la capital aragonesa. El restaurante Marengo, de la calle de Francisco de Vitoria, fusiona la gastronomía mediterránea con pequeños guiños a las tendencias culinarias de otras culturas con el objetivo de "acercar la alta gastronomía a todos los públicos". Así lo exponen Kike Júlvez y Carlos Vallejo, los dos emprendedores que están al frente de este establecimiento inaugurado en pleno centro al poco tiempo de abrir La Bocca.

Unas llamativas presentaciones ponen la seña de identidad a este restaurante que busca sorprender también en las que son sus primeras Navidades con un menú especial de Reyes (29,95 euros). Así pues, para celebrar este día festivo, el restaurante Marengo ha elaborado una selección de platos que prometen ser toda una experiencia culinaria. Para el aperitivo, hará los honores un canelón de brandada de bacalao en tempura negra que se acompañará de un arroz cremoso de pato, manzana y virutas de foie para compartir, entre otros entrantes. Los segundos platos incluyen creaciones tan sustanciosas como el popular taco de ternasco, un solomillo de ternera con foie y reducción de vino de Oporto o un taco de atún rojo. En el apartado de postres, un pastel de chocolate caliente con helado de vainilla de Madagascar pone la guinda a este menú que también contará con su propio roscón de Reyes.

Además, ocupan también un sitio especial en su carta las medias raciones y, por supuesto, las tapas, un "concepto –dicen- cada vez más valorado dentro y fuera de España por el cliente actual". Entre estas creaciones, destaca un original saquito de patata costrada, que al abrirse descubre unos tradicionales huevos rotos.

Eventos para dinamizar la zona

Desde que abrieron el pasado mes de agosto, los eventos han sido una constante en este establecimiento de la capital aragonesa. En noviembre organizaron su primera 'gin-moda' y no descartan seguir colaborando con tiendas de los alrededores "para impulsar y dinamizar el consumo en la zona". Por el momento, estos dos jóvenes emprendedores tienen su propia fórmula para vencer el respeto inicial que genera el compaginar dos negocios de reciente apertura en estos tiempos: "La pasión por lo que haces es fundamental a la hora de emprender un negocio. Siempre queda el gusanillo de saber si va a funcionar o no, pero por suerte al que le gusta esto, lo sabe llevar", concluye Júlvez optimista.

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