Maikel Mesa, objeto de deseo público del Tenerife, el equipo de su isla

Maikel Mesa, máximo goleador del Real Zaragoza en esta abrupta temporada con 11 goles desde su posición de mediapunta (o interior en algunos partidos), podría no seguir en el equipo aragonés el año que viene. El Tenerife, equipo de su isla, en el que solo jugó en la época formativa de su carrera, lo tiene en el primer rango de sus preferencias para reforzar la plantilla el próximo verano. 

El presidente del CD Tenerife, Paulino Rivero, no se escondió este martes a la hora de ponderar públicamente al futbolista canario, el '11' del Real Zaragoza en esta campaña que está ya próxima a concluir. "Maikel es un magnífico jugador. Su carrera deportiva lo avala y si dijese lo contrario me estaría engañando. Como canario imagino que la tierra le debe tirar”, lanzó al aire el dirigente chicharrero en una entrevista en la Cadena Ser en programación local.

Todo a cuenta de los movimientos que ya han trascendido en Santa Cruz relativos a un primer acercamiento del Tenerife al Real Zaragoza pidiendo detalles sobre el vínculo de Mesa con los aragoneses y los mecanismos necesarios para poner en marcha su trasvase al club del Heliodoro Rodríguez. El jugador, que enseguida, en junio, cumplirá 33 años, fue uno de los 10 fichajes de Juan Carlos Cordero, director deportivo del cuadro zaragocista, el pasado verano. Llegó libre, procedente del Albacete y firmó por dos temporadas. 

A estas alturas del curso, ya en los estertores, puede afirmarse que Maikel Mesa ha sido el único de esos nuevos refuerzos que ha cumplido holgadamente con su cometido de mejorar las prestaciones del errático Real Zaragoza de las tres temporadas precedentes. Sus 11 goles (3 de penalti) avalan esa sensación, más allá de que su participación en el fútbol colectivo de un equipo no haya sido constante ni brillante en muchos partidos. Mesa ha pagado, seguramente, el hecho de que este deficiente Zaragoza armado por Cordero con intenciones de ascenso, nunca mezcló bien y ha sido un caos táctico desde septiembre, con hasta tres entrenadores al frente sin lograr hallar la fórmula adecuada para hacerlo funcionar con algo de lustre.

En la recta final de su carrera futbolística, Maikel Mesa siempre ha subrayado que le encantaría acabarla en Tenerife, su casa. Así lo hizo nada más aterrizar en Zaragoza, cuando fue entrevistado por HERALDO DE ARAGÓN en la pretemporada en el Pinatar Arena de Murcia. Curiosamente, el canario sí que militó en un par de etapas en Las Palmas, club rival de los tinerfeños en el archipiélago, algo que le generó rozamientos con la afición local por la intrínseca rivalidad entre islas que rige desde siempre en el fútbol de allí. Ahora, Mesa puede estar cerca de hacer realidad su sueño de cerrar el círculo profesional en donde lo empezó de niño. Lógicamente, el único y no sencillo escollo a salvar por parte tinerfeñista es el contrato en vigor que tiene Maikel con el Real Zaragoza. 

En Tenerife circula la información de que la SAD zaragocista, de entrada, se ha remitido a la cláusula de rescisión que se firmó por parte de Cordero en julio cuando Maikel vino del Albacete: 3 millones de euros. Algo imposible de consumar en la burbuja de la Segunda División pero que no será, en ningún caso, la última instancia en las negociaciones si es que el Tenerife, como parece, está dispuesto a llevarse a Mesa desde Zaragoza hasta Canarias. La palabra del jugador, como siempre sucede en casos así, será un factor importante si esta iniciativa chicharrera sigue adelante.