El autor de un machetazo mortal en Zaragoza, de permiso 5 años después por buena actitud

El condenado por el asesinato de la calle Princesa ha recibido otra buena noticia, ya que un juez ha archivado la causa abierta contra él como presunto miembro de la banda latina DDP.

Sami Hamidi, de 20 años, fue apuñalado el 18 de noviembre de madrugada en la calle Princesa.
Sami Hamidi, de 20 años, fue apuñalado el 18 de noviembre de 2018  en la calle Princesa. de Zaragoza.
Oliver Duch

Sami Hamidi tenía 19 años cuando un machetazo en la pierna le seccionó la arteria femoral y acabó con su vida a las puertas de una discoteca de la calle Princesa de Zaragoza. Por este crimen, perpetrado el 18 de noviembre de 2018, se juzgó y condenó a tres menores. Y aunque han pasado poco más de cinco de años desde aquella trágica muerte, gracias a su buen comportamiento, Francisco G. S., autor material del asesinato, ha empezado a disfrutar ya de los primeros permisos. De hecho, hasta se le ha permitido dormir varias veces en casa. 

Pero no es la única buena noticia que ha recibido en las últimas semana Kiko, como en su círculo apodan al encausado. Porque un juez de la capital aragonesa acaba de archivar también la tercera investigación que abrieron contra él como presunto miembro de la banda latina Dominican Don’t Play (DDP), en la que sus integrantes lo barajaban como futuro líder.

A Francisco G. S. le faltaban unos meses para cumplir la mayoría de edad cuando ocurrieron los hechos. Puede parecer un cuestión baladí, pero resultó crucial a la hora de evitar una condena de hasta 25 años. Al autor del crimen se lo juzgó como menor. Y como tal, la pena máxima que se le podía imponer y se le impuso eran ocho años de internamiento. Se da también la paradoja de que, aún estando a punto de cumplir los 23 años, Kiko sigue en el centro de Menores de Juslibol. Podría haber sido trasladado al centro penitenciario de Zuera, como ha ocurrido con otro de los dos menores que fueron condenados por este asesinato en calidad de colaboradores. Pero a diferencia de este último, al autor del machetazo mortal le ha valido su buena actitud para evitar acabar en una celda.

"Este menor vino, preparó, organizó y ejecutó: mató a mi hijo. Y lo hizo de la manera más brutal del mundo. Cobardemente vinieron los cuatro -se juzgó a un cuarto implicado, mayor de edad, que acabó absuelto- a las cuatro de la madrugada, lo pusieron en un rincón, no le dejaron salida y otro vino por detrás y lo apuñaló", se lamentaba en su día Nadir, padre del asesinado, en una charla con HERALDO. "¿Por qué?", se preguntaba el hombre. "Porque se ha metido en un sitio donde le han comido el coco para que entre en una banda de una cultura que viene de otro lado. Y para lograr el título y ser un matador como ellos tiene que demostrar el valor y el valor es hacer semejante cosa", añadía.

Los padres creen que fue un bautismo de sangre

Los padres de Sami Hamidi siempre han creído que la trágica muerte de su hijo fue un bautismo de sangre de Kiko para entrar en los DDP. Y lo cierto es que los cabecillas de la organización en Zaragoza hablaban de este crimen como algo propio. Lo hacían en alguna de las conversaciones telefónicas que la Policía Nacional les intervino cuando puso en marcha una gran operación para desarticular la banda. Gracias a aquellas escuchas, los investigadores supieron también que el nombre de Kiko sonaba entre los futuribles líderes del coro zaragozano de la organización, declarada ilegal por el Tribunal Supremo.

Fueron precisamente aquellas escuchas las que llevaron a la Fiscalía Provincial a solicitar que se abriera una nueva causa penal, ahora ya como mayor de edad, contra Francisco G. S. Del asunto se hizo cargo el titular Juzgado de Instrucción número 11, quien hace ahora un año volvió a interrogar al encausado. Este negó su pertenencia a la banda y aprovechó para recordar al magistrado que ya lo habían investigado otras dos veces por lo mismo (siendo menor).

El juez leyó a Kiko la transcripción de las dos llamadas telefónicas intervenidas por la Policía en la que el número 2 de los DDP -Santiago Lerma Vallejo, en prisión- y otro menor atribuyen el crimen de la calle Princesa a la banda y hablan de él como uno los posibles integrantes de la nueva cúpula. Sin embargo, Francisco Manuel G. S. insistió en que nada sabe de las mismas y en que nunca ha estado vinculado a la organización. La Fiscalía, pese a ser la impulsora de esta nueva investigación judicial, no estuvo presente en la declaración, por lo que el trámite fue bastante breve.

La defensa del investigado, a cargo del abogado Alejandro Giménez, se apoyó en la falta de pruebas o indicios incriminatorios para solicitar el archivo de esta tercera causa. “Es muy peligroso e injusto que lo que digan o piensen terceras personas pueda servir de base para acusar a otra de unos hechos tan graves”, decía en su escrito. Y, finalmente, el magistrado ha optado por el sobreseimiento provisional.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión