Las obras de estabilización del túnel de Beceite obligan a establecer el corte de tráfico de la infraestructura a lo largo de toda esta semana, lo que convierte la pista forestal del pantano de Pena, en Valderrobres, en la única vía de acceso a uno de los principales centros turísticos del Matarraña turolense.

La planificación de los trabajos implica obras en horario diurno, entre las ocho de la mañana y las cuatro de la tarde, desde ayer lunes hasta este próximo viernes. Así que durante estas 40 horas, el medio millar de vecinos de Beceite sólo estará comunicado por carretera a través de una pista forestal que se encuentra en mal estado de conservación y vialidad.

La situación implica dificultades logísticas, de transporte y de circulación que este lunes lograron evitarse, de tal manera que los trabajos pudieron convivir con una apertura parcial del túnel, pero que a partir de este martes obligarán a una restricción completa del tráfico en esas horas. 

Complicada orografía

En un principio, el corte de la carretera obligaba a reorganizar el transporte regular de viajeros y el transporte escolar, pero a última hora del lunes el Ayuntamiento de la localidad turolense comunicaba que la carretera estaría abierta para el bus escolar y para los vehículos de emergencia. En todo caso, los trabajos suponen una dificultad que se añade a la propia orografía de una localidad ‘fondo de saco’, final de la carretera que parte desde Valderrobres, salida natural al Bajo Aragón y a Tarragona.

El pasado 3 de septiembre el túnel sufrió importantes desprendimientos que fueron provocados por las fuertes lluvias que cayeron en esos días en el Matarraña, y la carretera ya tuvo que ser cortada debido a que las rocas caídas dejaron impracticable la calzada en este punto. 

Intensos trabajos de limpieza por parte de la Diputación de Teruel lograron desescombrar la zona para poder reabrir la infraestructura al día siguiente y de este modo recobrar la vialidad, pero en la actualidad está siendo necesario revisar el estado del túnel y acometer obras de apuntalamiento y de reforma que garanticen la seguridad.