Último ruego para evitar la cárcel de un condenado enfermo de Caminreal: "Hablo de vivir o morir"

El procesado sufre patologías pulmonares y cardiacas que le obligan a permanecer atado a una máquina que le proporciona oxígeno.

El procesado.
El procesado, R. M.
H. A.

Un italiano que reside en Caminreal desde hace cuatro años y que está condenado por varios delitos de estafa a algo más de cinco años de prisión ha presentado un último recurso contra la orden de detención e ingreso en prisión que el Juzgado Central de lo Penal número uno de Madrid le envío el pasado 15 de septiembre. Dos meses antes, a mediados de julio, ya eludió la cárcel mediante un escrito de oposición que interpuso su abogada, Amparo Banqueri.

En ambos ruegos, el italiano, cuyas iniciales son R. M., esgrime que está muy enfermo, con patologías pulmonares y cardiacas que le obligan a permanecer atado a una máquina que le proporciona oxígeno y todas ellas incompatibles con la vida en una prisión. Padece, además, diabetes y anemia y asegura que no puede realizar el más mínimo traslado sin una ambulancia con oxigenoterapia. El procesado confía en que su último recurso, al que aporta un nuevo informe médico con datos recientes, le permita evitar la prisión. "Hablo de vivir o morir", afirma R. M., de 61 años de edad.

La abogada del condenado advierte de que este "se encuentra cada vez con menos fuerzas y con la angustia y la incertidumbre de saber si tendrá que entrar o no a la cárcel". Amparo Banqueri explica que, si el juez desestima su último recurso, solo quedará la opción de acudir al Tribunal Constitucional y apelar "al derecho fundamental que es vivir".

En su escrito al Juzgado de Madrid, Banqueri destaca que su patrocinado no ha vuelto a delinquir e invita al juez a efectuar las comprobaciones necesarias para acreditar la enfermedad y el sometimiento a tratamiento médico de R. M. La abogada apunta que algunos de los delitos que cometió el procesado han podido prescribir con el paso del tiempo y recalca que este ha estado y estará siempre a disposición de la Justicia, por lo que cabe aplicar medidas cautelares de localización que sustituyan a la cárcel.

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