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Una semana sin médico titular en la prisión de Zuera
Mientras el único facultativo del centro, en el que están ingresados 1.100 presos, estaba de vacaciones se utilizó únicamente la telemedicina para pasar consulta a los enfermos.
El centro penitenciario de Zuera ha pasado la última semana de julio sin el médico titular porque tenía vacaciones y los funcionarios tuvieron que aplicar la telemedicina con facultativos de otras prisiones, según denunciaron este lunes fuentes penitenciarias.
Esta situación inédita en la prisión zufariense, donde hay 1.100 internos, ha multiplicado el trabajo de las enfermeras de la cárcel al tener que realizar por ordenador la consulta médica de los internos.
"Un problema de los oídos o de abdomen, por ejemplo, que puede presentar algún preso no pueden examinarlo por el método de telemedicina", denuncia un funcionario del sindicato Acaip-UGT.
De cuatro a seis horas
Esta alternativa se utiliza de cuatro a seis horas al día con médicos disponibles de otras cárceles a los que se informa con un PC con cámara de la dolencia del interno y se le pone delante para que lo vea. Luego el facultativo envía por email la hoja de consulta/informe de urgencias o parte de lesiones,
El proceso de desaparición de los médicos empezó hace cuatro años, cuando la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias dejó de cubrir el riesgo de la noche y si hay alguna urgencia solo cabe que se haga un traslado en ambulancia a un hospital tras visitarlo una enfermera que esté de guardia.
Un funcionario hace una lectura positiva del uso de la telemedicina, y es su carácter disuasorio, puesto que se rebaja la presión del preso al médico para que le recete lo que pide. Así, el facultativo le receta lo que considera aplicando los criterios clínicos convenientes y no cabe otras alternativas médicas. "Cuando el preso regresa al módulo y cuenta a sus compañeros internos que es inútil pedir, que no da lo que quieres el señor que está detrás de la pantalla, pues disminuye la demanda de consultas", apunta un funcionario.