El pueblo de Aragón escondido entre montañas y ríos con un monumento inspirado en Roma
Esta pequeña y preciosa localidad de Teruel tiene 71 habitantes y muchos atractivos que hacen que sea ideal para visitar en invierno, uno de ellos es el manto de blanco en que se transforma gracias a la nieve.
Si lo que buscas es perderte en la naturaleza y disfrutar de la tranquilidad y belleza de sus paisajes, en Aragón puedes encontrar tu destino ideal para una escapada, bien de unos días o unas horas. Y es que en nuestro territorio son muchos los pueblos pequeños de cuento que en invierno se transforman en lugares mágicos que sin duda te harán desconectar del estrés del día a día por la tranquilidad que se respira en sus calles y alrededores. Estos bonitos rincones repartidos por la geografía aragonesa lo mismo destacan por ser diminutos como por sus preciosos cascos urbanos o entornos llenos de bosques, cascadas y rutas senderistas.
No es ningún secreto que el patrimonio arquitectónico, cultural y natural de Aragón es una gozada y es motivo de visita tanto del turismo nacional como internacional. La provincia de Teruel se lleva la palma en cuanto a pueblos con escasos habitantes pero, además, también puede presumir de encanto gracias a la variada y bellísima naturaleza que esconden sus enclaves.
Cabra de Mora, un pequeño pueblo de Teruel con 71 habitantes e infinidad de encantos
En la unión de los ríos Alcalá y Maleses, en la Comarca Gúdar-Javalambre, aparece enclavado en una ladera un pueblo lleno de encanto y rodeado de naturaleza que quita el aire entre ríos y montañas. En invierno, aunque su población escasea, muchos de sus encantos se multiplican, ya que se cubre de un manto de blanco por la nieve. Pero lo cierto es que merece la pena visitar este rincón de Teruel en cualquier época del año. Este bonito rincón turolense no es otro que Cabra de Mora, que con sus 71 habitantes podría colarse perfectamente en postales navideñas por la belleza indudable de su casco histórico.
Entre su patrimonio natural y monumental destaca la réplica de la Escala Santa de San Juan de Letrán de Roma, por donde subió Jesucristo en el palacio de Poncio Pilato. Es el legado que dejó un religioso nacido en la localidad, Miguel Vicente Abad Dolz Zapater, tras el impacto que le causó ver el original en la Ciudad Eterna. Y se ubica en una ermita contigua a la iglesia de San Miguel Arcángel, un impresionante templo con un gran altar barroco y una altura máxima de 33 metros, algo fuera de lo normal para ser un pueblo tan pequeño.
También es muy interesante conocer el Órgano de la Iglesia de Cabra, que cuenta con elementos totalmente originales, siendo una organería aragonesa muy representativa de la comunidad, que fue creado por Vicente Sospedra.
En los alrededores de este precioso pueblo turolense podemos disfrutar de la naturaleza gracias a rutas de menos de media hora, donde se puede pasar un rato agradable viendo espectaculares vistas espectaculares de la localidad y sus paisajes. Los miradores de San Cristóbal o de Pelamozos son perfectos para una excursión, así como el de la Sabina, el paseo a la Roca Hernando y el Camino Viejo de Mora, que nos permite llegar hasta la escultura del Ángel protector, o el camino de los sueños para perdernos entre los pinos.
Pero todavía hay más motivos por los que visitar Cabra de Mora. Esta localidad cuenta, además, con uno de los alojamientos más singulares de Teruel, que ostenta la categoría de cinco espigas y cuenta con restaurante para los clientes: la Casa del Silencio, con su fachada cubierta de hiedra, una docena de balcones, más de 40 puertas y casi 70 ventanas… y 1.000 metros cuadrados de extensión.
Y, por si fuera poco, más allá del idílico entorno que rodea al pueblo, perfecto para los que buscan practicar actividades en la naturaleza (turismo micológico, senderismo…), es que la ubicación de Cabra de Mora nos regala una visita a uno de los pueblos más bonitos de España, Rubielos de Mora, ya que se encuentra muy cerca, a unos 25 minutos.
Dónde comer en Cabra de Mora
El Restaurante Posada de Cabra es el lugar perfecto para comer en este pueblo de Teruel. Se ubica en la plaza Mayor, 1, y está abierto todos los días en horario de 13.30 a 15.30 y de 20.30 a 22.30.
Cómo llegar a Cabra de Mora, en Teruel
Para llegar a Cabra de Mora desde Teruel capital apenas necesitamos 46 minutos en coche, y hay que tomar la A-226. Mientras que para llegar desde Zaragoza hay que tomar la A-23 en un trayecto de dos horas y 25 minutos en coche.
