Que la fruta es saludable, en general, es algo probado por la ciencia y comprobado por quienes la incluyen de manera regular en su dieta. De temporada cuando se puede, de invernadero cuando no es su momento, las frutas son fuente de vitaminas, antioxidantes y fibra (en mayor o menor medida, según la variedad en España) y un excelente aliado a la hora de balancear correctamente una alimentación. Aunque pueden tomarse todo el día, incluso como refuerzos puntuales entre las principales comidas, la mañana es un momento fantástico para ingerirlas. Que el desayuno es la comida más importante del día lo saben todas las familias.

No sustituyen a un desayuno completo, ya que el cuerpo también agradece un aporte proteico y de grasas insaturadas para ponerse en marcha, pero sí redondean ese esfuerzo. Aunque el zumo forma parte de la tradición española y también de las últimas tendencias, en su versión detox, siempre es preferible tomar la fruta entera, para no perder la fibra y lograr además un efecto saciante que evite las visitas a la despensa o los picoteos a media mañana.

Las frutas ideales para un organismo que se despierta son las maduras, que ya han convertido su capital de hidratos en azúcares sencillos, de absorción lenta, que no causan en el organismo los picos de glucosa que obligan a una reacción rápida del páncreas con la generación de insulina.

Propiedades y beneficios del plátano

El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación señala en su glosario de frutas las propiedades del plátano, un aliado habitual de los deportistas, desde los aficionados al trote mañanero a los tenistas, que suelen comerlos en pleno partido, en los cambios de lado. El 3,4% de fibra (especialmente, la llamada inulina) y 20% de hidratos de carbono que contienen los hacen de acción contundente y progresiva al mismo tiempo.

Sorprende especialmente el dato de la fibra, muy superior al de otras frutas conocidas por esta atribución, como el kiwi. El tránsito intestinal lo agradece. El plátano también aporta potasio y magnesio, que previenen los calambres y regulan la hipertensión. Por otra parte, tienen vitamina B6 y C.