Plan de choque contra la sequía
La sequía ha hecho saltar las alarmas en Aragón, no solo por la falta de lluvias sino también por las elevadas temperaturas, las previsiones meteorológicas poco halagüeñas y, sobre todo, porque todas estas circunstancias coinciden ya al inicio de la primavera.
Es difícil recordar un ejercicio en el que las alertas por la escasez de agua llegasen ya desde los primeros días de abril, recorrieran todo el territorio de la Comunidad, afectaran a prácticamente todos los cultivos y pusieran en riesgo la campaña no solo de secano sino también de las producciones de regadío. La confluencia con otros fenómenos, como la elevada inflación en toda Europa, los altos precios de los alimentos y la escasez de cereal en los mercados internacionales por los efectos de la invasión de Ucrania, hace necesario elaborar ya un plan de choque para ayudar a la agricultura y la ganadería, con diferentes medidas, desde las ayudas directas a reducciones fiscales o apoyos indirectos.
El Gobierno aragonés reconoce "una gran preocupación" y ha convocado a las organizaciones agrarias y las cooperativas a una reunión que se celebrará el próximo jueves, 20 de abril. Será justo un día después de que Aragón participe, junto con el resto de las comunidades autónomas y los principales protagonistas del sector, en la Mesa de la Sequía convocada por el Ministerio de Agricultura para analizar la grave situación que padecen los cultivos de todo el país por la falta de precipitaciones. El agua va a ser también este año un recurso escaso y eso nos obliga a extremar la calidad de la gestión, con medidas de ahorro más contundentes y la optimización de los sistemas de riego y almacenamiento. Como medidas paliativas de la sequía, son necesarias ayudas para los sectores más afectados y una considerable mejora tanto de la gestión como del control del uso del agua.
