gastronomía
Un Solete Repsol a fuego lento para los platos de cuchara de El Candelas
El establecimiento es, según la guía, el cuarto mejor en la categoría en España. Las recetas con garbanzo y el cocido son "los reyes" de la carta.
Hace semanas que el cierzo sopla con ganas en la capital aragonesa y eso decanta al cocinero hacia el 'chup-chup' y empuja al comensal hacia el plato de cuchara. En resumidas cuentas, que ya va apeteciendo comer caliente y con la adecuada contundencia. Por eso la Guía Repsol, que en verano se sacó de la chistera unos acertados 'Soletes' con los que destacar esos establecimientos que tienen algo especial, ha vuelto a la carga esta temporada para dar el merecido reconocimiento a los restaurantes que tratan con especial mimo la alubia, la lenteja, el garbanzo y sus pretendientes.
Uno de esos locales que manejan la técnica con soltura es El Candelas (Maestro Mingote, 3), en Zaragoza, considerado por la guía como el cuarto mejor en España en estas lides. El negocio, ubicado en el barrio de Las Fuentes y que acaba de soplar nada menos que sesenta velas, tiene en su carta una interesante propuesta para los que disfrutan de este tipo de comida pero no tienen tiempo para andar entre pucheros.
"Los platos de cuchara están muy presentes en nuestros menús y todos los días ofrecemos al menos uno. Hoy (este jueves) tenemos garbanzos con espinacas y bacalao", cuenta Ana Abadías, propietaria de El Candelas. También el menú de fin de semana, con un precio de 23,50 euros, ofrece una de estas creaciones. Los clientes podrán optar por judías verdinas este sábado y domingo.
En el establecimiento juegan mucho con el garbanzo. "A veces lo preparamos con bogavante, pero también lo que llamamos garbanzos de ayuno, que llevan una majada de pan tostado con almendra y huevo rallado. No necesitan nada más, así están deliciosos", afirma la hostelera. No desmerecer la materia prima es otra de las claves: "Los garbanzos son de Salamanca, consideramos que compramos los mejores".
Otras recetas se asoman periódicamente a la carta. Es el caso de los boliches del Pilar, las lentejas guisadas o la fabada, que en El Candelas preparan por encargo. También la alubia canela guisada y, cómo no, el cocido, con una puesta en escena canónica. "Es otro de nuestros buques insignia, procuramos que salga poco graso y no añadir nada raro, solo tocino, jamón, chorizo... Queremos que a los clientes les recuerde al cocido de su madre y también que repita. Al menos, es lo que hace la mayoría cuando volvemos a sacar la sopa", asegura Ana.
