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Termina el plazo para cobrar la lotería de Navidad: ¿hasta qué día se pueden cambiar los décimos?
El sorteo del Gordo se celebró hace meses pero todavía hay quien tiene pendiente pedir el reembolso de alguna participación o boleto premiado.
El sorteo extraordinario de la Lotería Nacional que se celebra en Navidad es uno de los más populares cada año. En 2023 repartió 2.590 millones de euros en premios. Las imágenes de la alegría de los agraciados con el conocido como Gordo de la lotería se quedan grabadas en la memoria de todos cada mes de diciembre. Los ganadores tienen un plazo concreto para cobrar el dinero, si no caduca.
El abanico de premios es muy amplio ya que va desde el primer premio de 400.000 euros (328.000 después de impuestos) hasta los 20 euros que puede tocar con la 'postura', cuando solo se acierta el último número, pasando por las 'pedreas' de 1.000 euros.
Los décimos de la lotería de Navidad caducan el 22 de marzo
"Hay que estar atento porque los premios caducan transcurridos tres meses", advierten desde Loterías y Apuestas de Estado, la empresa pública que organiza el sorteo. La cita con los bombos tiene lugar cada 22 de diciembre y el último día para cobrar los billetes premiados siempre es el 22 de marzo. Desde las Administraciones de Lotería recuerdan que los boletos "caducan" ese día y que no hay margen para abonarlos después. Pese a que los plazos son siempre los mismos, sigue habiendo despistados que llegan a última hora.
Dónde cobrar la lotería
Si se cuenta con un décimo de lotería se puede acudir a por el dinero a cualquier administración de lotería si no superan los 2.000 euros. En estos casos, Loterías los considera premios "menores" Sin embargo, si superan esta cantidad habrá que ir a una entidad financiera. Loterías destaca que en los bancos no podrán hacer efectivo el pago sin pedir "la documentación e información necesaria para dar cumplimiento a las obligaciones legales de identificación". Así, se vigila el cumplimiento de la normativa sobre prevención de blanqueo de capitales.
En el caso de las participaciones de décimos que se venden desde organizaciones como asociaciones, peñas culturales, clubes deportivos, etc. estas entidades privadas cobran el importe y luego lo reparten entre los premiados. Cada papeleta incluye una cantidad o 'recargo' que se queda la organización ya que el fin suele ser recaudar fondos. En principio, la fecha tope sería la misma.
Cómo cobrar un décimo compartido
En muchos casos el décimo puede haberse comprado entre varios familiares o amigos, algo que a veces termina dando problemas. Si tienen la suerte de haber percibido un premio de los "mayores", deben acudir al banco "todos los titulares del premio para identificarse en la entidad financiera", recalcan desde Loterías. Si el grupo es numeroso y voluntariamente los agraciados así lo prefieren, "pueden designar un representante para realizar las gestiones en nombre de todos", añaden, siempre que este apoderamiento se haga ante notario. "Ya que hablamos de importes elevados de caudales públicos, requiere tener certeza de a quién y por qué se paga", añaden desde dicho organismo público.
Qué impuestos hay que pagar por ganar la lotería
El Estado cuenta con un impuesto especial de loterías, pero solo para las cuantías más elevadas. Los premios inferiores a 40.000 euros por décimo o apuesta no tienen que pagar el impuesto especial para los juegos de la Sociedad Estatal Loterías y Apuestas del Estado (SELAE). Si se percibió una cantidad mayor se descuenta este límite exento y sobre la diferencia se aplica un 20%. Así, un premio de 100.000 euros, tributaría al 20% sobre 60.000 euros (100.000 - 40.000), por lo que el Estado se quedaría con 12.000 euros y el ganador se llevaría 88.000 euros, según pone de ejemplo la Agencia Tributaria en la información sobre el sorteo del pasado año en su página web. No hay que declararlos en ningún otro impuesto.
La importancia de repartir el premio en el banco antes de cobrarlo tiene su reflejo también a la hora de declararlo a Hacienda. Esta advierte expresamente que en el caso de premios compartidos (grupo de amigos o parientes, peñas, cofradías...), en los que el premio se reparte entre todos los participantes "se deben distribuir los 40.000 euros que están exentos entre todos los beneficiarios, en proporción a su porcentaje de participación, y quien proceda al reparto del premio que figure como beneficiario único (o como gestor de cobro) por haberlo manifestado así en el momento del cobro del premio". Además, estas persona que se designe deberá estar en condiciones de acreditar ante la Administración Tributaria que el premio ha sido repartido a los titulares de participaciones, siendo por tanto necesaria la identificación de cada ganador y su porcentaje de participación.
