El exdirector general del Real Zaragoza Jesús García-Pitarch, juzgado por maltrato psicológico y vejaciones hacia su expareja

El que fuera directivo del club maño durante la época de Agapito Iglesias reconoce la autoría de una serie de mensajes que envió a la mujer, pero la acusa a ella de “tomarle el pelo”.

El director general del Real Zaragoza, Jesús García Pitarch
El exdirector general del Real Zaragoza Jesús García-Pitarch

El exdirector general del Real Zaragoza Jesús García-Pitarch ha sido juzgado este martes en la capital aragonesa como presunto autor de un delito leve de maltrato psicológico y vejaciones a raíz de la denuncia interpuesta hace unos meses por su expareja, una mujer a la que conoció durante la única temporada que recaló en el club maño y con la que habría mantenido una relación intermitente desde 2014, ya que durante los últimos años el investigado habría estado trabajando no solo en España, sino también en Inglaterra y Emiratos Árabes Unidos.

Durante la vista, celebrada en el Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 2 de Zaragoza, la denunciante ha explicado que a lo largo de todo este tiempo cortaron la relación en varias ocasiones, pero que fue en noviembre de 2021 cuando ella la dio por zanjada definitivamente. Lo hizo, ha relatado, porque estaba cansada del “control y las humillaciones” a los que supuestamente le sometía García-Pitarch, al que describe como una persona “de temperamento fuerte, mentirosa, manipuladora compulsiva y narcisista”. Según esta, no quería que siguiera trabajando como modelo, la insultaba y chantajeaba emocionalmente.

Según la denunciante, ni siquiera después de la ruptura el exfutbolista valenciano dejó de acosarla y vejarla. La mujer ha explicado que el problema se agravó a partir del verano de 2022, cuando el investigado regresó de su estancia en Abu Dabi y al enterarse que ella había iniciado una relación con un empresario del sector del vino empezó a enviarle mensajes de Whatsapp criticándola y menospreciándola. La Unidad de Familia y Mujer (UFAM) de la Policía Nacional en Zaragoza examinó dichos mensajes y emitió un informe en el que concluía que desprendían “patrones de conducta de acoso en el denunciado”, quien se mostraba, decían los investigadores, “persistente y contumaz” en querer mantener comunicación con la mujer para retomar la relación.

“Tira a la basura tus 41 años, ya que solo te han servido para que lelos y abuelos hayan querido abusar, tocarte y exhibirte. 41 años sin oficio, ni beneficio ni profesión. Y tiesa como la mojama”, decía uno de los mensajes que envió García-Pitarch a la zaragozana. Cuando formuló la denuncia, esta explicó que que exdirector general del Real Zaragoza no solo la vejaba directamente a ella, sino que también lo hacía a través de terceros. Por ejemplo, enviando mensajes a su actual pareja, al que se refería como “fofito” (por su supuesto parecido físico al cómico) y llamaba “cateto”. Según ha manifestado el bodeguero durante su comparecencia en la vista como testigo, en una ocasión recibió un mensaje del investigado en el que le decía: “Bienvenido al club de los sponsors cornudos”.

Él le reclama 72.000 euros

El exdirectivo del club maño durante la época de Agapito Iglesias, que no se ha desplazado a la Ciudad de la Justicia de Zaragoza porque ha declarado por videoconferencia, ha reconocido haber enviado los mensajes que obran en la causa. Sin embargo, ha dejado claro que durante los años que duró la relación “nunca” insultó a su expareja. Si lo hizo, se ha justificado, fue al volver a España y comprobar que le había “tomado el pelo”, porque estaba saliendo con otra persona cuando él estaba convencido de que seguían juntos. De hecho, ha contado, ella seguía residiendo en una vivienda de su propiedad.

Jesús García-Pitarch ha aprovechado para disculparse públicamente por el modo en el que se refirió a la actual pareja de la denunciante. Y tanto él como su abogado, Isidro Villanova, consideran que la denuncia por maltrato psicológico y vejaciones es la respuesta a la demanda civil que el exdirector general del Real Zaragoza interpuso contra ella reclamándole los 72.000 euros que supuestamente le había prestado durante el tiempo que estuvieron juntos.

Al tratarse de un delito leve, la Fiscalía ha pedido que se condene a Jesús García-Pitarch a 30 días de localización permanente. Por su parte, la acusación particular, a cargo del letrado Javier Osés, ha solicitado que se le imponga una multa de 900 euros así como una orden de alejamiento que le impida comunicarse o acercarse a su expareja durante seis meses. Ella ha renunciado a cualquier indemnización que pudiera corresponderle y solo pide que el investigado asuma la ruptura de la relación.

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