zaragoza

La crecida alcanza el embalse de Mequinenza y Pina reabre la carretera cortada

Las lluvias han incrementado los caudales en los afluentes de la margen izquierda pero sin alcanzar magnitudes preocupantes, según la CHE. 

Situación de la riada del Ebro a su paso por la Ribera Baja.
La carretera cortada desde este sábado en el término municipal de Pina de Ebro.
Toni Galan

La crecida ya ha remitido y ha alcanzado el embalse de Mequinenza, según han informado este domingo desde la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE). Sin embargo, todavía se siguen recuperando en los municipios donde el agua causó daños. Aunque fue ordinaria y finalmente no alcanzó ningún casco urbano, en el sector de la agricultura se cuentan por cientos las hectáreas de cultivo que, previsiblemente, acabarán echándose a perder tras pasar tanto tiempo bajo el agua. Además, en el término de Pina de Ebro, en la Ribera Baja, ha reabierto esta tarde al tráfico la carretera cortada A-1107. 

Desde el organismo de cuenca explican que la tendencia es descendente en los caudales del eje del Ebro y en muchos de sus afluentes. Las lluvias registradas sobre todo durante la jornada del han vuelto a dar lugar a repuntes de caudal en afluentes de la margen izquierda como el Gállego, pero aseguran que en ningún caso están alcanzando magnitudes que sean preocupantes. Además, no se prevén nuevas precipitaciones en los próximos días, lo que permitirá, según indican desde la CHE, que se recupere poco a poco la normalidad. 

Según los indicadores del Sistema Automático de Información Hidrológica (SAIH), el Ebro a su paso por Zaragoza discurre esta tarde con un caudal de 959 metros cúbicos por segundo, frente a los 1.633 que llegó a alcanzar en el pico de la crecida. Aguas abajo del embalse de Flix el caudal vertido está estabilizado en unos 900 m³/s.

El Ayuntamiento de Pina ha revisado esta mañana el estado de la A-1107, por donde a primera hora todavía pasaba "un pequeño hilo de agua" a causa del viento que se ha levantado esta zona, según indica su alcalde, Pablo Blanquet. Antes de que recuperara por completo la normalidad los técnicos de la Dirección General de Carreteras acudieron para cerciorarse de que se encuentra en buen estado y que la avenida no ha causado ningún daño que haya que reparar. 

En cuanto a los terrenos anegados, Blanquet explica que los sistemas de desagüe están abiertos para que poco a poco el agua pueda ir volviendo al río, aunque calcula que aún se tardará "un par de días o tres" hasta que la situación vuelva a la normalidad. Además, la mota por donde se desbordó el río todavía sigue rota. 

Desde allí se coló el agua a los campos de cultivo de Pina y también a los de Quinto. El regidor de este municipio, Jesús Morales, lamenta que con una crecida que alcanzó únicamente los 1.600 hectómetros cúbicos por segundo no deberían haberse inundado estos terrenos. Sin embargo, denuncia que la mota "no tenía ni la solidez ni la altura suficientes", ya que el río llegó a pasar por encima. Por eso, recalca que es "necesaria y urgente" su reparación. "Vamos a ver más avenidas por el deshielo o por lluvias y si no todo el agua que pase por allí, en cuanto se superen los 1.200, va a seguir saliendo", advierte. 

En la Ribera Baja ya no queda "nervio", tal y como dice Morales, porque "todo lo que se podía mojar ya se ha mojado". Sin embargo, los alcaldes y vecinos de la zona sienten "indignación" por saber, dice, que las pérdidas económicas que va a suponer esta riada "se podrían haber evitado con una mejor gestión". 

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión