Selfis y confidencias de la alcaldesa Chueca, en su estreno como anfitriona en las visitas guiadas al Ayuntamiento de Zaragozanos
La regidora de la capital aragonesa ha acompañado a un grupo de ciudadanos en la primera jornada de puertas abiertas por San Valero.
En su primer año como alcaldesa, y visiblemente emocionada, Natalia Chueca ha compartido selfis y confidencias con un grupo de zaragozanos que esperaban en las puertas del Ayuntamiento a las 17.00, en una tarde de niebla y frío, para participar en la jornada de puertas abiertas por la festividad de San Valero. El primer turno tenía premio: la anfitriona de excepción era la alcaldesa, que ha salido en su encuentro en cuanto se han abierto las puertas.
Lo primero que han visto en el hall son los Gigantes y cabezudos, que ya están listos para salir este lunes a recorrer las calles de Zaragoza. Tras una breve explicación, la comitiva ha subido por la escalinata de alfombra roja, escuchando con atención las indicaciones de la alcaldesa. Chueca ha explicado cómo se recuperó en la Casa Consistorial, durante la era de Juan Alberto Belloch, una mesa y unos sillones de la alcaldía de Juslibol, un regio escritorio donde se escenificó la firma del exalcalde Jorge Azcón en el Libro de Oro de Zaragoza, después de tomar posesión como presidente de Aragón.
La alcaldesa ha declamado sin titubear todos y cada uno de los títulos de Zaragoza, que no son pocos: "La Muy noble, Muy leal, Muy heroica, Siempre heroica, Muy benéfica e Inmortal". Y ha explicado cómo le gusta tener cuadrados de las heroínas de Los Sitios, que defendían también los derechos de los ciudadanos. En su despacho hay un cuadro sobre Agustina de Aragón, pintado por su nieta; de la Virgen del Pilar, un busto de Francisco de Goya, que se piensa que inspiró la estatuilla con la que se premia el talento del cine español, y un retrato de un jovencísimo Felipe VI.
La techumbre de madera del despacho de la alcaldesa y del salón del Consejo de Gobierno procede del antiguo Palacio de los Marqueses de Osera. Al llegar al salón de plenos, uno de los visitantes le ha propuesto "hacer un pleno". Resuelta, la alcaldesa le ha respondido: "Voy a la presidencia y empezamos". Pocos sabían que las sesiones, que se suelen celebrar el último jueves de cada mes, están abierta al público, y que pueden participar, incluso, en la exposición de las mociones. "Hay transparencia absoluta", ha dicho la regidora. "Sin trampa ni cartón", ha apuntado uno espontáneo.
En otro de los salones, donde horas antes ha intervenido junto al embajador de China en España, Yao Jing, ha mostrado los retratos de casi todos los alcaldes de Zaragoza. De la época reciente faltaba uno, el de Jorge Azcón. "Está pensando aún a qué autor le hace el encarg", ha confesado la alcaldesa. Durante la visita sonaba, de fondo, música contemporánea, de fiesta, distinta a la que antaño tocó la orquesta que amenizaba los actos en el altillo de ese mismo salón consistorial. Si se retoma la música, la alcaldesa se decantaría por el vals, ha asegurado. Así ha puesto punto final a la visita, agradeciendo el interés de los zaragozanos, y sin perder la sonrisa en los selfis que, de recuerdo, se han llevado los zaragozanos a los que ha guiadado en su primera visita como alcaldesa.
