El Casino de Teruel ofrece este martes una conferencia a cargo de naturalistas en la que se hará especial hincapié en el valioso trabajo que realizan los centros de recuperación de fauna silvestre que existen en la Comunidad Autónoma. La cita es esta tarde a las 19.00 en el Salón Noble, con entrada libre hasta completar el aforo.

Uno de los conferenciantes es José Antonio Pinzolas, miembro de la Asociación Naturalista de Aragón (Ansar), que alertará de la pérdida de aves que se produce al colisionar estas con las aspas en movimiento de los aerogeneradores instalados en parques eólicos.

Pinzolas relata que en sus recorridos por el ámbito de actuación de Ansar, que incluye las comarcas del Campo de Borja, Ribera Alta y Las Cinco Villas, ha encontrado un elevado número de pájaros muertos o heridos por choque con los molinos de viento. De estos últimos, ninguno sobrevive. 

En el plazo de dos años, Ansar ha localizado casi 300 aves muertas por esta causa, entre las que figuran águilas, calandrias, buitres y murciélagos. De entre todos ellos, los buitres y los murciélagos son las víctimas más frecuentes de las instalaciones de energías renovables. 

José Antonio Pinzolas destaca que el recuento de cadáveres de Ansar no coincide con el que realizan las empresas propietarias de las instalaciones de energías renovables, a quienes la Administración encarga el seguimiento y la vigilancia de este tipo de accidentes, y cuyas cifras son siempre bastante inferiores.

Pinzolas afirma que el objeto de su charla "es dar voz a lo que permanece oculto, a lo que no se oye por ahí, porque los datos son preocupantes". El naturalista pide al Gobierno aragonés que no permita la instalación de parques de energías renovables en lugares que puedan perjudicar al hábitat de aves, pues la pérdida de biodiversidad es un grave problema que debe evitarse.

También contarán su experiencia miembros de Amigo Mío, la protectora de animales de la capital turolense que tiene a su cargo un albergue que acoge a decenas de perros y gatos abandonados.