El pacto PP-Vox en Extremadura complica el Gobierno en solitario que defiende Azcón
Los siete votos en contra del partido de extrema derecha ‘tumbarían’ la investidura del líder popular.
Los gobiernos de Aragón y Murcia son los únicos que siguen pendientes de un acuerdo PP-Vox. La coalición en Extremadura, sellada en tiempo récord tras la rectificación de María Guardiola y que incluye la cesión de una consejería a la extrema derecha, complica el objetivo de Jorge Azcón de liderar un Gobierno en solitario. Y más cuando Santiago Abascal dejó claro que el modelo de Baleares, que se pretendía emular en Aragón, con la presidencia de las Cortes pero sin consejeros, no se repetirá.
Tras el pacto en la Comunidad Valenciana, este viernes cayó el segundo gobierno de coalición. En Vox Aragón son conscientes de que sus siete escaños son suficientes para ‘tumbar’ la investidura de Azcón y aseguran que no regalarán su abstención, según confirmaron desde el partido. Creen que las direcciones generales se quedan cortas y manejan expectativas más altas que depender de un consejero popular. Solo contemplan hablar con el PP, en ningún caso con terceros, lo que invalidaría, casi de partida, la posibilidad de que suscriban un pacto previamente firmado entre Azcón y el PAR.
La opción del Gobierno en solitario se complica, también, por la tensa relación que mantienen entre ellos Teruel Existe y el PAR, cuya colaboración es imprescindible para la investidura. Tomás Guitarte y Alberto Izquierdo compiten por hacerse fuertes en Teruel, y luchan por el control de la Diputación. Aunque tenían casi cerrado un tripartito con Joaquín Juste como presidente, el acuerdo se ha roto. El mando se lo queda el popular, Teruel Existe gestionará las dos vicepresidencias y dejan a los aragonesistas fuera.
No tira la toalla Alberto Izquierdo, e intentará entrar al Gobierno de la Diputación hasta el último momento. Si se queda fuera, desvincula la ruptura al acuerdo programático que ofrece a Azcón para votar ‘sí’ en su investidura. Por si dijera finalmente ‘no’, se apunta a que el pacto Azcón y Guitarte podría ir más allá del acuerdo para la Diputación. Si fuera el caso, le cederían los ‘síes’ necesarios para superar a la izquierda y el PAR (29), el de dos de sus tres diputados, para ser presidente con la abstención de Vox.
¿Aceptarían los Alejandro Nolasco esta situación? Difícil parece, tras las críticas mordaces que dedicaron desde Vox a Tomás Guitarte cuando con su voto hizo presidente del Gobierno al socialista Pedro Sánchez.
Volvemos a la situación de inicio, la que refleja que PP y Vox suman 35 escaños, uno más que la mayoría absoluta, y que cualquier alternativa requiere que la extrema derecha opte por la abstención. Y no están por la labor. Menos, al ver cómo se cerró ayer en Extremadura el pacto con la cesión de Agricultura, una opción que suena con fuerza en Aragón.
Desde Génova se justifica el acuerdo extremeño incidiendo en que el voto de Vox es imprescindible y el PP no suma más que la izquierda; dos características que se cumplen también en Aragón.
¿Cuándo será la investidura?
Si no se altera el calendario de la ronda de contactos, Marta Fernández proclamará a Azcón candidato el viernes tras escuchar a Ana Alós, portavoz del PP. Se fijaría, a partir de entonces, la fecha del pleno de investidura, que se podría celebrar aunque España esté en campaña electoral.
Los plazos se están acelerando. El PP de Murcia iniciará el lunes la negociación con Vox de un acuerdo programático. Los de Fernando López Miras, que están a dos escaños de la mayoría absoluta y necesitan la abstención de Vox, van a intentar alcanzar la investidura "lo antes posible". Si lo consiguen, el único Gobierno en liza por constituir sería el de Aragón, el que, salvo sorpresa mayúscula, dirigirá Azcón.
