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"Es indignante que no reabran las urgencias pediátricas del Royo y tengamos que cruzarnos toda Zaragoza"

La consejera de Sanidad, Sira Repollés, ha asegurado este viernes que el Hospital Infantil tiene capacidad para acoger a los menores de ambos sectores sanitarios. 

Tere Lostao, junto a su marido y sus hijos Abay, Cloe y Candela.
Tere Lostao, junto a su marido y sus hijos Abay, Cloe y Candela.
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La decisión del Departamento de Sanidad de no volver a abrir las urgencias pediátricas del Hospital Royo Villanova ha caído como un jarrón de agua fría a las familias que lo tienen como hospital de referencia. "Es indignante que para una picadura infectada o una torcedura tengamos que cruzarnos toda la ciudad", ha lamentado Tere Lostao, madre de Candela, de 13 años; Abay, de 11 y Cloe, de 8. 

Desde que el 22 de marzo de 2020 se cerrara este servicio para poder dedicar más espacios a la atención a pacientes de covid, las familias tienen que desplazarse al Hospital Infantil, donde las esperas, según ha apuntado Lostao, se pueden dilatar "por encima de las tres horas". "Tenemos los recursos y los espacios, pero han decidido masificar el principal hospital de la ciudad", ha criticado.

No es la única que no está conforme con la decisión. Juan Antonio Andrés, de la Comisión de Salud de la Federación de Asociaciones de Barrios de Zaragoza, ha señalado que varias familias ya se han puesto en contacto con él para mostrar su malestar. "Los vecinos de la margen izquierda tiene el mismo derecho a tener los mismo servicios", ha apuntado, al tiempo que ha reclamado a Sanidad que aclare cuál va a ser la cartera de servicios del Royo y cómo se va a efectuar la ampliación anunciada. 

La consejera de Sanidad, Sira Repollés, ha asegurado que el Hospital Infantil tiene capacidad para atender a los niños de ambos sectores sanitarios. Y lo ha ejemplificado con datos: "Actualmente el Infantil atiende 155 urgencias diarias, en 2021 fueron 139 y en el periodo de 2017 a 2019, cuando funcionaron las urgencias pediátricas del Royo, había 137". Asimismo, ha recordado que, en el caso de que un menor tuviera que ser ingresado o había que hacerle una prueba más avanzada, "se le derivaba al Infantil".

Otros problemas del Royo

Andrés ha explicado que, además de la falta de urgencias pediátricas, otro de los problemas de este hospital es el servicio de Traumatología. "No hay personal específico, por lo que cuando entra una urgencia de trauma, se paraliza todo", ha recordado. De hecho, si la patología que presenta tiene determinada gravedad, "se le traslada al Miguel Servet". 

Ha incidido en que de la pandemia también queda todavía el uso de unos barracones como salas de espera. "Tienen aire acondicionado, máquinas de comida, pero es un sinsentido. Además, la megafonía se escucha fatal", ha lamentado. Y el problema no se queda ahí: "Para unos 200.000 vecinos entre Zaragoza y los pueblos cercanos solo hay dos hospitales pequeños que parecen de juguete -en referencia al Royo y al Hospital Provincial Nuestra Señora del Carmen-".

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