Teruel
La afluencia de senderistas en Teruel a los Estrechos del Guadalope se multiplica por siete en menos de una década
El Ayuntamiento de Aliaga busca personal para crear un servicio de remonte con vehículos todo terreno tras quedar desierto el primer concurso
Las pasarelas que permiten recorrer a pie el cañón que forma el río Guadalope entre las montañas de las localidades de Aliaga y Montoro de Mezquita reciben cada vez más visitantes. Los primeros tramos de este sendero se abrieron en 2014 y desde entonces hasta ahora, completado un recorrido de 20 kilómetros, la afluencia de caminantes se ha multiplicado por siete al pasar de un centenar de personas en un fin de semana a más de 700.
El éxito de la ruta, bautizada como Hoz Mala-Estrechos del Guadalope, ha activado los establecimientos hosteleros de la zona. Según explica el alcalde en funciones de Aliaga, Sergio Uche, el sábado y el domingo han pasado a ser los mejores días para los bares y restaurantes, cuando hace solo una década el fin de semana no resultaba rentable para estos establecimientos porque su clientela se componía principalmente de trabajadores de la zona que acudían de lunes a viernes.
"Ahora hay que reservar plaza para comer y para dormir, algo que no imaginábamos hace unos años", afirma Uche. En Aliaga hay 200 plazas de alojamiento incluidas las del camping, así como dos bares-restaurante. A los senderistas se suman grupos de geólogos que realizan estancias de varias semanas en la localidad para estudiar las curiosas formaciones montañosas de la zona.
Ante el constante aumento del número de visitantes y la considerable longitud del recorrido –20 kilómetros–, el Ayuntamiento de Aliaga ha decidido poner en marcha un servicio de remonte en vehículos todo terreno que permita a los senderistas regresar en coche al punto de partida, donde han dejado aparcados sus vehículos antes de iniciar la caminata. Este sistema evitará que aquellos visitantes que deciden completar el itinerario entre Aliaga y Montoro de Mezquita tengan que realizar otros 20 kilómetros a pie de vuelta –40 en total– para llegar a la zona de parkin.
Pionero en la provincia de Teruel
Uche subraya que se trata de un servicio pionero en la provincia de Teruel, aunque no en el resto de Aragón. En la zona del Pirineo, hay enclaves en los que existen furgonetas a disposición de los senderistas para regresar cómodamente a la zona de aparcamiento.
Sin embargo, el concurso para adjudicar este servicio de remonte ha quedado desierto y ahora el Ayuntamiento quiere contactar personalmente con vecinos de la localidad y de poblaciones próximas con el objetivo de encontrar a la persona idónea que pueda hacerse cargo del trabajo.
"El problema –explica Uche– es que no tenemos a nadie en paro en el municipio y por eso nos está costando resolver esta cuestión". El alcalde confía, no obstante, en que el servicio de remonte pueda ser una realidad este verano, cuando la afluencia de visitantes a los senderos aumente todavía más.
El adjudicatario prestará también servicio de taxi a los vecinos de la zona, pues ahora el más cercano de estos vehículos está en Montalbán, a 38 kilómetros de distancia. El Ayuntamiento tiene previsto recurrir también a esta prestación para trasladar a aquellos vecinos que lo necesiten a la unidad de diálisis del hospital Obispo Polanco de Teruel.
"Es un buen negocio –recalca el alcalde de Aliaga–, pues el Ayuntamiento va a ofrecerle las mejores condiciones al adjudicatario y a este no le va a faltar trabajo".
El sendero, que discurre junto al desfiladero por el que corre el agua del río Guadalope, se acondicionó en distintas fases y contó con ayudas del Gobierno de Aragón, de Europa y de la Federación Aragonesa de Montaña. El mantenimiento de las instalaciones corre a cargo del Ayuntamiento de Aliaga, quien lo realiza a través de la empresa Prames.
No obstante, está en proceso de creación un consorcio que aglutinará a las comarcas Cuencas Mineras y Maestrazgo además de los ayuntamientos de Aliaga y Villarluengo y que se ocupará de la conservación de los senderos.
