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Seis planes refrescantes para los fines de semana antes de las vacaciones
Bañarse en piscinas naturales, hacer una escapada a la playa, ir al Parque de Atracciones así como hacer turismo de naturaleza son algunas de las propuestas.
Con las vacaciones de verano a la vuelta de la esquina y una climatología más propia de agosto que de junio, los fines de semana en la ciudad pueden hacerse ya pesada. Como antesala de un merecido tiempo de descanso estival, aquí van seis planes refrescantes para hacer estas semanas previas.
Bañarse en piscinas naturales
El calor que se viene sufriendo en Aragón desde mediados de mayo ha hecho que, este año, los baños pozas, embalses o riberas se hayan adelantado. Según el Sistema Nacional de Aguas de Baño, del Ministerio de Sanidad, en Aragón hay 20 playas continentales aptas para el baño. La Loteta (Boquiñeni-Luceni, el Mar de Aragón (Caspe) o San Bartolomé (Ejea de los Caballeros) están en la provincia de Zaragoza. En Teruel, está el pantano de Arquillo (San Blas) o La Estanca de Alcañiz. El embalse de Búbal o el de Lanuza son dos de los más famosos de Huesca, provincia donde más zonas de este tipo hay.
Además, en toda la Comunidad hay 63 puntos de interés fluvial, según la web del Instituto Aragonés del Agua. En algunos de estos lugares está permitido el baño y entre los más famosos están el pozo Pigalo, en el río Arba (Luesia, Cinco Villas) o el archiconocido Salto del Bierge (Hoya de Huesca). A este último se accede comprando una entrada de tres euros y está abierto del 10 de junio al 31 de agosto. Otro enclave popular es el Pozo de los Chorros en el río Aguasvivas (Belchite); sin embargo hay un cartel que aclara que el lugar presenta “aguas no aptas para el baño".
Improvisar una escapada a la playa más cercana
Para aquellos que no se conformen con las playas continentales que hay en Aragón, una escapada de fin de semana a la costa es una buena alternativa. Con la AP-2 gratuita, el viaje a Salou y otras playas de la costa Dorada es ahora más barato, aunque también puede que más largo, ya que el tráfico se ha incrementado. Donde sí se ha acortado el tiempo de trayecto es a la zona de Castellón. Con las obras de mejora del puerto de Querol a su paso por Morella (carretera nacional 232) el viaje a Peñíscola o Benicarló desde Zaragoza se ha reducido y es más llevadero para un fin de semana.
Un día en el Parque de Atracciones
Otro posible plan para estos fines de semana de tanto calor es ir al Parque de Atracciones y montarse una y otra vez en las atracciones de agua. El resto pueden esperar a las horas en las que el sol apriete menos. Además la piscina del recinto está ya abierta de martes a domingos.
Hacer turismo de naturaleza
Quienes ya estén empezando a dormir mal por las noches a causa del calor, la montaña oscense o los pueblos de Teruel son su salvación. En estas zonas cuando el sol cae, también lo suele hacer la temperatura por lo que incluso se echa en falta una colcha con la que taparse. Aprovechando la escapada, se pueden hacer excursiones a parajes naturales con amplias zonas de sombra, como el Monasterio de Piedra o los Galachos de Juslibol, así como recorrer senderos de montaña.
Inaugurar Las Playas de Zaragoza y las piscinas municipales
Hasta ahora, quienes no tienen piscina en casa ni tampoco amigos o familiares que las tengan los días se están haciendo un poco más cuesta arriba. Pero a partir de este fin de semana eso va a cambiar. El sábado 11 de junio se inaugura la temporada 2022 en las piscinas municipales de Zaragoza y será sin límite de aforos y con total normalidad. Además, el espacio de Las Playas, en el Parque del Agua, ya está abierto. El calendario de apertura se prolonga hasta el 4 de septiembre y el horario de baño es de 10.30 a 20.30. Además de la zona de agua, hay un espacio de bar, que se mantendrá abierto hasta altas horas y también se puede jugar a voleibol sobre arena. También están abiertas al público ya la piscinas de la Residencia de Estudiantes Pignatelli de Zaragoza.
Visitar museos, centros comerciales o ir al cine
El último de estos planes refrescantes para combatir el calor de junio sin apenas salir de la ciudad tiene un componente común: el aire acondicionado. No es lo más saludable pero para un rato es un alivio contra las altas temperaturas. Por eso, sobre todo en las horas centrales del día, hay planes de interior que pueden ser tan frescos como bañarse en un río del Pirineo. Ir al cine es una de estas alternativas. Además ahora que ya no son obligatorias las mascarillas se vuelve a disfrutar al cien por cien de la gran pantalla. Otra opción en esta misma línea es visitar un museo y, en la versión menos cultural y más ociosa, pasar el día en un centro comercial. Estos complejos, además de tiendas, ofrecen cada vez más actividades. En el caso de Puerto Venecia, se puede alquilar una barca para recorrer el lago, saltar en camas elásticas, escalar en un 'boulder' o jugar a los bolos.
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