Aumentan los problemas mentales y persiste la falta de recursos en psiquiatría

La incidencia de episodios de psicosis por consumo de drogas en jóvenes aumenta cada año.

El Hospital Miguel Servet de Zaragoza
Aumentan los problemas mentales y persiste la falta de recursos en psiquiatría
Heraldo

La crisis ha provocado que muchas personas vean cómo su situación personal empeora y, por lo tanto, algunos acaban sufriendo patologías mentales transitorias provocadas por el estrés. Al menos, así lo aseguran varios entendidos del mundo de la psiquiatría y la medicina en general. Valero Pérez Camo, responsable del servicio de psiquiatría del Hospital Clínico Lozano Blesa de Zaragoza, afirma que la principal causa de esta situación es la falta de control de los estímulos externos. “Muchas personas, aunque hayan actuado de forma correcta, se encuentran en una situación de desempleo con la que no pueden competir y esto genera mucho estrés y desesperanza, como consecuencia, crecen las patologías ligadas a la depresión”, explica. Al mismo tiempo, esta nueva situación ocasiona que los problemas mentales previos se agudicen y necesiten más tiempo de hospitalización.


De la misma opinión es Chelo Pardo, vocal de salud del Colegio Profesional de Trabajadores Sociales de Aragón. “En el día a día se ve un incremento de personas con cierta vulnerabilidad que necesitan ayuda psicológica por la crisis, y al mismo tiempo también se agravan las patologías de aquellos que ya sufrían trastornos mentales”, apunta Pardo. De hecho, en 2013 se atendieron desde el Servicio de Urgencias del Hospital Miguel Servet a más de 1.000 enfermos psiquiátricos y se hospitalizaron alrededor de 500 pacientes en la planta de agudos.


Prueba de ello es que las 115 camas de psiquiatría -según las ratios recomendadas debería haber unas 156- de los hospitales aragoneses se encuentran casi siempre llenas. “Está todo colapsado”, subraya María del Mar Novellón, representante de Marea Blanca. Además, destaca que tienen una gran presión para dar altas en los servicios de trastornos mentales. “Intentamos que las estancias sean lo más cortas posibles para atender a todos los pacientes puesto que cada vez hay una mayor demanda de camas”, asegura el doctor Pérez. Según el responsable del servicio de psiquiatría del Hospital Clínico, serían necesarias unas 15 camas más en la provincia de Zaragoza para ir más desahogados.


Hay que recordar que durante estos años se han inaugurado dos unidades dedicadas a la atención de pacientes con problemas mentales. Durante el año 2013 se puso en marcha la unidad infanto-juvenil en el Clínico, en la que se atiende a jóvenes de entre 14 y 18 años con enfermedades mentales graves. Este mismo año también se ha creado el hospital de día en el Miguel Servet, que incluye 15 plazas más de corta estancia. Sin embargo, todas estas modificaciones no son suficientes para atender una demanda cada vez más creciente. De hecho, algunos enfermos tienen que acudir a centros privados para conseguir ser atendidos en el menor tiempo posible. “Hemos visto cómo en los últimos años ha aumentado el número de pacientes en nuestras instalaciones debido a la carencia de recursos del sector público”, asevera Lola Pérez, gerente del centro PRISMA.


Al mismo tiempo, desde Marea Blanca recuerdan que si se sigue adelante con la idea de reunificar las seis unidades de la zona II de Zaragoza -los pacientes de Torrero, Las Fuentes, Casco Viejo, Casablanca y San José serán trasladados a los Centros de Salud de Sagasta y Valdespartera-, la situación empeorará. Muchos no podrá acudir a sus centros, por lo que pueden dejar de tomar sus medicaciones y agravarse las enfermedades que sufren, con la consecuencia de que se colapsará todavía más el sistema actual.

Más estancia media en psiquiatría

Según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), la estancia media en los hospitales aragoneses ha crecido ligeramente en el último año, pasando de los 6,77 días que pasaban los enfermos dentro de los centros a los 7,04 que estuvieron en 2013. De este modo aumenta por primera vez desde que en 2008 comenzara la crisis económica y, por lo tanto, se empezaran a implantar las técnicas del Ministerio de Sanidad de reducir la estancia hospitalaria. La razón de este incremento se encuentra en el caso de los enfermos con trastornos mentales, cuya estancia media sube desde los 22,68 días que había en 2012 a los 35,19 que hay en la actualidad.


“Esto se debe sobre todo a los pacientes crónicos que han sido dados de alta”, explica el doctor Valero Pérez. Estas personas suelen estar ingresadas durante largas temporadas y en el momento en el que se produce el alta de alguno de ellos, sube rápidamente la estancia media. “Puede ser que algunos enfermos que llevaran más tiempo fueran trasladados a los pisos tutelados”, puntualiza Pérez. Esto explicaría los cambios tan dispares que se producen. Además, a estos pisos suelen acudir muchos pacientes de media o larga estancia que no pueden volver con sus familias.

Aumento de psicóticos por consumo de drogas

Entre las nuevas tendencias que se observan en el área de psiquiatría destaca el crecimiento de casos de jóvenes con cuadros psicóticos y de consumo, lo que se denomina una patología dual. De hecho, es el único grupo de enfermedades cuya estancia media va incrementándose continuamente durante los últimos seis años, en concreto, ha pasado de 8,4 días de media a 10,7 en 2013. “Cada vez hay más jóvenes de entre 18 y 30 años que ingresan con estos cuadros, prueba de ello es que la estancia media de la unidad psiquiátrica del Clínico se está ampliando en este 2014 por estos casos”, sostiene Valero Pérez.


“Estamos muy preocupados porque por la utilización de las drogas el cerebro se está volviendo más sensible a la toma de medicamentos y cada vez les hacen menos efecto”, explica. De hecho, este grupo tienen que ser ingresados en unidades de media y larga estancia, debido a la lentitud con la que responden a los medicamentos que se les suministran. “Es una pena porque son personas que si no estuvieran en contacto con las drogas no estarían enfermos, pero este abuso provoca que se les activen los problemas psicóticos”, puntualiza.