Cuando Erno Rubik, profesor húngaro de arquitectura, inventó el cubo que lleva su nombre en 1974, no podía imaginar en qué iba a convertirse su invento, al que él llamaba "cubo mágico".

Años después, exactamente 44, el joven australiano Feliks Zemdegs, se ha hecho con el récord mundial consiguiendo resolver el rompecabezas en tan solo 4,22 segundos. ¿Qué ha llevado a este cubo de seis colores a convertirse en el afamado juguete que es hoy en día?

El objeto fue creado por el profesor como medio para explicar a sus alumnos conceptos como las relaciones espaciales. Hoy en día, lo que empezó siendo un mero proyecto de clase, se ha convertido en uno de los juguetes más vendidos del mundo, porque, ¿quién no ha tenido entre sus manos un cubo de Rubik? Hasta ahora, se calcula que se han vendido más de 400 millones de cubos.

Además, seguro que alguna vez te has preguntado cómo funciona el famoso “cubo mágico”. A simple vista parece sencillo, pero es todo un rompecabezas. Puede tener más de 43 trillones de combinaciones.

El cubo esta formado por 26 piezas (cubos) pequeñas. Cada una de ellas se entrelaza con las otras piezas de tal forma que se pueden mover a diferentes posiciones. En cambio, las piezas centrales de cada una de las caras son fijas. Esto hace que las otras 20 piezas puedan girar alrededor de ellas.

Para resolver el cubo de rubik existen diferentes métodos formados por algoritmos, secuencias memorizadas de movimientos que tiene un efecto deseado en el cubo. Se han desarrollado varias teorías que permiten resolverlo en menos de 100 movimientos. La más famosa pertenece al profesor de matemáticas David Singmaster, quien basó su teoría en resolverlo capa por capa: la superior primero, seguida de la de en medio y terminando por la inferior. Los hay quienes se han atrevido a resolverlo incluso con los ojos cerrados, y tú, ¿te atreves a resolverlo?

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