La lluvia no acobardó a las decenas de personas que se acercaron en la tarde de este domingo a la plaza del Pilar para disfrutar de las jotas en el día de la Hispanidad. Como es habitual cada 12 de octubre y con motivo de la Ofrenda de Flores de la Virgen, este lugar se convierte en un escenario de excepción en el que los mejores interpretes y bailarines de jota se dan cita. 

En esta ocasión, la jornada comenzó por todo lo alto. A las 17.00 los finalistas de los certámenes de Jota Pilar 2014 hicieron su aparición con una técnica y una emoción que asombró a los asistentes. La lluvia tampoco quiso perderse el espectáculo, sin embargo no fue suficiente para ahuyentar al público que disfrutaba escuchando las jotas.

Era el caso de Antonio y su mujer, María Luisa. Estos zaragozanos no quisieron perderse la imagen de la Virgen ni tampoco las jotas y por ello se acercaron hasta la plaza del Pilar para disfrutar de ambas. "Ya es emocionante ver a la Virgen así, llena de flores y con las jotas lo es todavía más". Lo mismo opinaba Angelines, en primera fila del escenario. "Yo me emociono cuando escucho estas jotas, no puedo evitarlo, pero se me llenan los ojos de lágrimas, y más un día como este". 

Por categorías y uno a uno le cantaron a una Virgen repleta de flores entre gritos y caras de emoción de los asistentes. Tras su actuación, llegó el paso de abrir el IV Festival Nacional de Jota en el que  actuaron el Grupo de Danzas de Logroño, Baluarte Aragonés y Coros y Danzas de Santander. Un espectáculo hasta las 21.00.

Ni los artistas, ni los asistentes, ni los que pasaban para ofrecer sus flores a la Virgen dejaron que el fuerte chaparrón de descargaba a media tarde entristeciera un día tan feliz para miles de personas, dentro y fuera de las fronteras aragonesas.