Desde hace seis años, el 1 de mayo además de ser el Día del Trabajo, en Barbastro es la fiesta del tomate rosa. La Asociación de Hortelanos del Alto Aragón decidió aprovechar el festivo para celebrar la Jornada del Plantero, que da inicio a la plantación del tomate rosa de Barbastro en las huertas de la ciudad y de otras poblaciones del Somontano.

Jornada festiva y de exaltación de la huerta y de uno de sus productos estrella, que por primera vez se podrá encontrar este verano en el mercado bajo el distintivo homologado de ‘Barbastro’, tras el acuerdo de septiembre de 2014 del Ministerio de Industria que le concedía la marca registrada. Algo por lo que han peleado los hortelanos del Somontano ante el fraude que aparece en muchos mercados nacionales que venden como tomate rosa otras variedades de inferior calidad.

Todo empieza a partir de ahora, con la plantación, aunque en algunas explotaciones ya se ha comenzado a cultivar la preciada hortaliza. Las previsiones son optimistas y se espera superar en un 20% la cosecha pasada, llegando a 1.200.000 kilos comercializados en Aragón y varios puntos de España. El último, dos selectas redes de tiendas de Madrid que lo han etiquetado como producto gourmet de alta calidad. Ha sido la última ‘pica’ que los hortelanos de han puesto atendiendo a la gran demanda del producto en Madrid. También en Barcelona, desde donde llegaron varias personas a buscar la planta "para que no les engañen y que sepan que se llevan tomate rosa originario de Barbastro", explicaba José Antonio Armengol, presidente de la Asociación de Hortelanos.

Se repartieron sobre 5.000 plantas ante numeroso público. Había una veintena de puestos, entre viveristas, artesanos y empresas agroalimentarias. Las asociaciones de barrio repartieron tostadas de aceite cedido por el Consorcio Oleícola a una continúa marea de gente que en la mañana de ayer tomó la plaza del Mercado. Entre los colaboradores, el presidente de honor de la asociación, Javier Betorz, que puso en marcha esta iniciativa hace seis años.