Ortega Cano regresa a la cárcel de Zuera tras seis días de permiso con la familia

El regreso ayer de José Ortega Cano a la prisión de Zuera causó incluso mayor revuelo mediático que su salida, el pasado 5 de enero. El torero apuró al máximo el permiso de seis días concedido por el juez de vigilancia penitenciaria y se presentó en la macrocárcel zaragozana a las 10.35 (el plazo expiraba a las 11.00). Lo hizo acompañado de su pareja, Ana María Aldón, con la que tiene un hijo y quien también fue a buscarle hace hoy una semana. Ortega Cano explicó que ha dedicado estos seis días de libertad a disfrutar de la familia, con la que ha pasado la mayor parte del tiempo en su residencia madrileña de Aldea del Fresno.

Sin embargo, el diestro también se ha dejado ver la semana pasada por la capital aragonesa, donde residen actualmente su compañera sentimental y el hijo de ambos y donde también tiene el despacho su abogado, Enrique Trebolle. Según este, Ortega Cano ha podido disfrutar de este primer permiso de seis días al haber cumplido más de un cuarto de la pena que se le impuso, ya que se le condenó a dos años y medio e ingresó en prisión el 23 de abril de 2014. El diestro tuvo que pasar las Navidades y su cumpleaños –el pasado 27 de diciembre cumplió 61 años– entre rejas, pero logró al final la autorización del juez para pasar la festividad de Reyes con lo suyos.

Como el resto de internos de sus características –ahora está en segundo grado–, el torero podrá volver a solicitar un nuevo permiso ordinario dentro de dos meses, ya que son hasta seis (siempre de seis días) los que puede disfrutar a lo largo de un año.

El matador de toros cumple condena en el denominado módulo de respeto de Zuera, junto a algo más de un centenar de internos de los menos conflictivos. Durante los más de ocho meses que lleva ya entre rejas Ortega Cano ha participado en numerosos cursos y actividades. Su comportamiento y adaptación han sido también muy buenas, lo que el torero espera que se valore cuando la junta de tratamiento tenga que decidir si se le concede o no el tercer grado. Este beneficio, que le permitiría pasar el día fuera de la prisión y regresar solo para pasar la noche, podría concedérselo ya en cualquier momento. En cualquier caso, a diferencia de los permisos ordinarios, no es el juez sino la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias quien lo concede.

Durante el tiempo que ha pasado fuera de Zuera, José Ortega Cano se ha visto en varias ocasiones con la prensa, lo que ha aprovechado para pedir perdón a la familia de Carlos Parra Castillo, el hombre de 48 años que perdió la vida en el accidente de tráfico que provocó el torero –que conducía con una tasa de alcohol que triplicaba la permitida– a la altura del kilómetro 28 de la carretera que une Castilblanco de los Arroyos y Sevilla. "Cuando se está cumpliendo una condena lo asumes todo. Yo pido voluntariamente perdón a la familia. Desde que pasó, le rezo, porque soy una persona muy creyente. Fue un accidente y quiero ponerme a disposición de la familia, como siempre", declaró el torero a los periodistas.

Hasta ahora, Ortega Cano solo había salido en una ocasión del centro penitenciario de Zuera y fue para ser hospitalizado en el hospital Miguel Servet, donde pasó diez días a comienzos del pasado mes de noviembre para ser tratado de una neumonía. Anteriormente, el diestro había sido trasladado a este mismo centro en distintas ocasiones para someterse a diferentes pruebas médicas, dadas sus dolencias coronarias, pero nunca había sido necesario proceder a su ingreso. En cualquier, su abogado asegura que los médicos de la prisión lo tienen muy bien atendido y que la salud del diestro no ha empeorado durante estos meses.