La vivienda de los detenidos –L. I. B., una mujer de 32 años; y J. L. R. G., un varón de 31 años– fue asaltada el pasado 11 de octubre por una banda dedicada a extorsionar a narcotraficantes. La Guardia Civil detuvo al grupo tras el asalto pero al inspeccionar la casa de las dos víctimas localizó 300 gramos de cocaína. L. I. B. afirmó entonces que las drogas las dejó en la vivienda un exnovio. La explicación no convenció al Juzgado de Calamocha, que dirigía la operación contra la banda extorsionadora.

El juez de Calamocha derivó el hallazgo de los estupefacientes al Juzgado número 2 de Teruel, que abrió una investigación. Paralelamente, la Policía seguía la pista de una denuncia anónima contra la misma pareja.

El pasado lunes, durante el registro de la vivienda de L. I. B. y J. L. R. G., la Policía Nacional localizó un alijo de 189 gramos de cocaína, así como fármacos utilizados para adulterar la droga, una balanza de precisión para elaborar las dosis y pequeñas cantidades de hachís, marihuana y ‘cristal’. Tras tomarles declaración, el juez ordenó el ingreso en prisión de ambos detenidos. Además, requirió la comprobación de la situación del hijo de L. I. B., de 3 años, para prevenir una situación de desamparo. El pequeño, que no estaba en la casa cuando se produjo el registro, podría encontrarse con la abuela materna. El valor de los casi 500 gramos de cocaína aprehendidos en la vivienda entre el lunes y el pasado 11 de octubre asciende a 26.100 euros.