CIENCIA

Algunos dinosaurios sobrevivieron a la extinción de hace 65 millones de años

La extinción en masa de hace 65 millones de años no acabó con todos los dinosaurios y algunos lograron sobrevivir medio millón de años más, según un geocronólogo estadounidense.


James Fassett halló en las areniscas de "Ojo Álamo", en la cuenca de San Juan en EEUU, fósiles posteriores a la extinción en masa, que indican que los dinosaurios vivieron en esa zona remota de Nuevo Mexico y Colorado hasta medio millón de años más.


El científico dijo a EFE que ignora por qué finalmente desaparecieron estos saurios, aunque al ser los descendientes de unos pocos supervivientes posiblemente su diversidad genética era escasa, lo que les hizo más susceptibles a la enfermedad.


La investigación, publicada hoy en la revista "Paleontologia Electronica", se centró en análisis químicos detallados de los huesos y la edad de las rocas donde fueron descubiertos los fósiles.


Los datos palinológicos (el estudio de los fósiles de polen y esporas) indican que la totalidad de las areniscas "Ojo Álamo", incluida la parte inferior donde fueron hallados los dinosaurios, datan del Paleoceno, el periodo inmediatamente posterior a la extinción masiva del final del Cretácico, conocido como límite K/T (Cretácico-Terciario), según el estudio.


La gran dificultad con esta hipótesis es descartar la posibilidad de que los huesos descubiertos fueran removidos por un río de los estratos más profundos de la época del Cretáceo e incorporados a rocas más jóvenes, según el autor del estudio.


Aunque ésta no es la manera usual en la que se forman fósiles de este tipo, ha servido ya para explicar el hallazgo de otros huesos de dinosaurio posteriores a la extinción.


Fassett explicó que hay restos de dinosaurios del Paleoceno encontrados en Francia y en Montana (EEUU), aunque eran cáscaras de huevos o dientes y no huesos intactos como los de "Ojo Álamo".


Entre los fósiles de las areniscas figuran 34 huesos de hadrosaurio unidos, que sin duda pertenecen a un mismo animal y hacen imposible que fueran arrastrados por un río, que los hubiera dispersado, señala el geocronólogo.


Fassett comprobó además que las rocas donde estaban los fósiles son más recientes que el límite K/T, al analizar su polaridad magnética y los granos de polen que contienen.


Las concentraciones de elementos de metales raros en los fósiles de Ojo Álamo y en los hallados en las rocas del Cretácico, a mayor profundidad, son claramente distintos, lo que "hace muy improbable que los huesos fueran exhumados de los sedimentos inferiores", señala.


Según David Polly, editor de la revista que publica el estudio, las conclusiones de Fassett son "controvertidas" y muchos paleontólogos se mostrarán escépticos.


"Supongo que esto es normal si tenemos en cuenta cuánto tardaron algunos en aceptar el hecho de que la Tierra es redonda y no plana", dijo Fassett.


Por su parte, Polly recuerda que los terópodos voladores (pájaros) y los cocodrilos sobrevivieron a la gran extinción, por lo que no es tan descabellada la idea de que hubiera algunas bolsas de supervivientes de otras especies de dinosaurio.


"Pero encontrar pruebas concluyentes cuando la escena del crimen tiene 65 millones de años es difícil", apunta.


Según Polly, "una cosa es segura: si los dinosaurios sobrevivieron, no estaban tan extendidos como antes del final del Cretácico y no pervivieron durante mucho tiempo".


Por eso, "El mundo perdido" de Sir Arthur Conan Doyle, en el que humanos y dinosaurios coexisten y que ha sido llevado tantas veces al cine en Hollywood, sigue perteneciendo al reino de la fantasía.