Hace muchos años que Cristina Blanco decidió retirarse de la vida pública para no interferir en la carrera artística de su hijo, Miguel Ángel Muñoz. Ahora, la que fuera en su día la vidente de los famosos, vuelve a estar de actualidad por el delicado momento de salud que atraviesa y en el que está contando en todo momento con el apoyo del actor. Así lo ha revelado en exclusiva la revista 'Semana', que ha tenido acceso a fuentes cercanas al intérprete. La publicación ha confirmado que Cristina Blanco está ingresada en un hospital de Madrid donde «permanece estable» después de que le hayan «amputado una pierna». Lleva un mes hospitalizada «debido a que su estado era delicado», si bien «está previsto que le den el alta en los próximo días». Durante este tiempo, Miguel Ángel Muñoz ha estado al lado de su madre. «Se ha preocupado muchísimo por su madre», señalan las mismas fuentes a 'Semana'. «No la ha dejado sola en ningún momento y ha acudido a todas y cada una de las reuniones con sus médicos para conocer de primera mano los datos sobre su evolución», dicen.

La muerte de la tata

En previsión de su próxima alta, el actor está buscando un centro especializado para que reciba los cuidados más adecuados ya que parece que no será posible ponerle una prótesis, lo que hará que requiera de más atenciones en su día a día. Su profesión como actor le dificulta poder acompañarla durante 24 horas, por lo que ha optado por buscar ayuda profesional, según apuntan personas cercanas a su familia.

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Este contratiempo ha llegado para el protagonista de 'Un paso adelante' solo cuatro meses después del fallecimiento de Luisa Cantero, su tata, quien le crio de niño y con quien tenía una estrechísima relación que pudimos ver durante el confinamiento, cuando la Tata se convirtió en una estrella de las redes sociales. Tanto que en 2021 protagonizó su propio largometraje, '100 días con la Tata'.

Cristina Blanco fue durante años la vidente y amiga de famosos como Belén Esteban, Lara Dibildos, Rocío Carrasco o María Teresa Campos y sus hijas, Terelu y Carmen Borrego. Unas amistades que la convirtieron en un rostro habitual de la televisión. Pronto llegaron las polémicas. Primero, una cámara oculta puso en entredicho sus supuestas dotes adivinatorias, pero su momento más difícil llegó en 2007 cuando fue condenada a 16 meses de prisión tras ser acusada de robar tarjetas de crédito a los clientes de un hotel de Marbella. La ausencia de antecedentes hizo que no entrara en la cárcel.

Entonces, su hijo también estuvo a su lado: «Dejé todo lo que estaba haciendo para cuidar de mi madre unos días», relató en su día el actor al Risto Mejide en su programa 'Viajando con Chester'. «Lo vives con mucha dificultad y la máxima compasión que tienes a la persona que más quieres en el mundo», confesó. En aquellos años, Miguel Ángel Muñoz comenzaba a consolidar su carrera en el mundo de la interpretación, con lo que «ella decidió apartarse y quedarse en un segundo plano, prácticamente invisible, para que a mí no me tuviesen que hacer este tipo de preguntas y eso se lo agradeceré siempre», reveló.