¿Qué fuman en las series y las películas?
El tabaco no es un buen compañero de trabajo y por eso está vetado en rodajes y grabaciones.
Los puros de Grouxo Marx, los cigarritos de Clint Eastwood en las películas de Sergio Leone, Bogart encendiéndole el pitillo a una sensual Lauren Bacall... el cine y el tabaco tienen una larga y fructífera relación y hay cientos de películas en las que algún personaje aparece fumando, aunque solo sea un momento.
Pero los tiempos cambian y el tabaco ha perdido la consideración social que tenía hace décadas. Los vínculos entre el cigarrillo y una larga lista de enfermedades no dejan dudas y las campañas para que los fumadores abandonen su hábito se han dejado notar en nuestra sociedad. También en el mundo de la interpretación se nota ese efecto y hoy, en nuestras pantallas, se fuma menos que hace 30 o 40 años.
Aún así, hay personajes que siguen vinculados al humo y el pitillo. Tony Soprano o Don Draper -los protagonistas de las series 'Los Soprano' y 'Mad Men', respectivamente- no serían lo mismo sin un cigarro en la mano. Solo que lo que ellos fuman poco tiene que ver con los pitillos que usaban los actores de otras épocas.
Así, hasta hace unas décadas, los intérpretes fumaban tabaco real: cigarros y puros que, por otro lado, eran de consumo habitual entre buena parte de la población.
Hoy en día, es casi impensable que se obligue a un actor a fumar cigarros de verdad. Para estos casos, se emplean unos pitillos hechos con hierbas: no contienen tabaco y por tanto, tampoco nicotina, lo que evita la peligrosa adicción de estos productos.
Una de las marcas más habituales en Hollywood es Ecstacy Herbal Cigarettes, que incluye entre la composición de sus productos malvavisco, lechuga, salvia, hojas de trébol, zumo de manzana o miel, entre otros. Estos cigarros no son inocuos, lo admite la propia marca, pero sus efectos son mucho menores que los del tabaco y su capacidad de crear adicción es mínima.
No obstante, los colectivos que luchan contra el consumo de tabaco creen que deberían eliminarse de nuestras pantallas todas las escenas con fumadores, para evitar así que las series y las películas animen al consumo. De hecho, la Universidad de California tiene una plataforma, Smoke Free Movies (películas libres de humo, en español), con la que quiere presionar a la industria audiovisual y que incluye listados de filmes en los que no aparece ni una calada.
