Quedaban pocos días para cerrar el plazo del certamen de fotografía científica Fotciencia y Antonio Luis Martínez Cano buscó algo que tuviera, literalmente, "al alcance de la mano". Preparó la escena en el lavabo de su cuarto de bajo: cartulina negra de fondo, flashes, reflectores. Y su propio dedo. Entre las más de 800 fotografías que tomó estaba esta: ‘Atracción digital’, premio de la modalidad General. Fotógrafo y arquitecto, su intención era "explicar un hecho científico básico, aunque no muy conocido a nivel popular, mediante una imagen impactante, directa, armónica, que provocase en el espectador cierta sorpresa, curiosidad e interés". La fotografía muestra cómo el chorro de agua que cae del grifo, al entrar en contacto con el dedo, cambia su trayectoria y fluye por su curvatura debido a algo característico de los fluidos: la adhesión. Debido a su pequeño caudal, el chorro no se divide, gracias a la tensión superficial y a la cohesión del fluido.

La cohesión es la fuerza de atracción que mantiene unidas a las moléculas de una misma sustancia. La adhesión es la fuerza de atracción que se manifiesta entre las moléculas de dos sustancias diferentes que se ponen en contacto.

Desde su punto de vista, "los elementos naturales crean constantemente formas bellas, armoniosas y atractivas que la mayoría de las veces pasan desapercibidas". Por eso le gusta captarlas. Con esta imagen, seleccionada en la modalidad General y titulada ‘Resina fosilizada producida por los árboles de coníferas’, pretende transmitir "un tipo de belleza estética que se puede encontrar a través del ojo científico". El resultado, y eso es lo que más le interesa, roza la abstracción.

La palabra 'ámbar' proviene etimológicamente del árabe  'ánbar': lo que flota en el mar. El ámbar, árabe o succino es una piedra semipreciosa compuesta de resina vegetal fosilizada proveniente principalmente de restos de coníferas y algunas angiospermas.

¿Por qué producen resina los árboles? Los árboles producen la resina como una protección contra enfermedades e infestaciones de insectos, cuando la corteza de un árbol es herida debido a rotura o a un ataque por escarabajos de madera u otros insectos, bacterias u hongos. Después de exudar al exterior, la resina se endurece por polimerización en el interior de rocas arcillosas o arenosas, algunas veces calizas, que se formaban en zonas deltaicas de ríos, generalmente con mucha materia orgánica asociada, y se han conservado en su interior durante millones de años.