Cuando todavía no se encuentra el tráfico preparado para convivir entre peatones, coches y bicicletas, la tecnología propicia una nueva segmentación de usuarios de las vías públicas: las personas que escriben mensajes de whatsapp. 

Puede parecer una broma, pero lo cierto es que el uso del móvil en las aceras, mientras se anda o, incluso, en edificios públicos subiendo y bajando escaleras provoca accidentes, ya que la persona que se encuentra haciendo las dos actividades a la vez (desplazarse y escribir) ralentiza su paso y ve reducida su atención. 

En la Utah Valley University han encontrado una solución para evitar que los usuarios de la tecnología puedan provocar incidentes por ser incapaces de dejar de usar sus teléfonos mientras recorren las instalaciones del campus. De tal forma que han decidido pintar unas líneas en el suelo, delimitando tres carriles para los estudiantes que caminan (izquierda), corren (centro) o escriben en el móvil (derecha).

La propuesta se ha hecho viral recibiendo "atención local, nacional e internacional", según explica la dirección del centro situado en Orem y que acoge a unos 30.000 alumnos. Lo cierto, es que según han confesado desde el propio centro, la idea surgió del departamento de marketing y comunicación, cuya intención era decorar los pasillos con líneas y etiquetas, haciendo un guiño a los jóvenes que los cruzan a diario. Todos quedaron sorprendidos cuando los estudiantes empezaron a hacer caso de las indicaciones pintadas en el suelo.