Denuncian colapsos en el Clínico por la formación sobre el ébola que recibe el personal sanitario

Desde CSIF Aragón critican que no se está sustituyendo a los sanitarios que asisten a los cursos, lo que ocasiona retrasos "puntuales" en el área de Medicina Interna.

Varios pacientes en camilla esperan junto a sus familiares en los pasillos de Traumatología del hospital Clínico de Zaragoza, este jueves por la tarde.
Denuncian colapsos en el Clínico por la formación sobre el ébola que recibe el personal sanitario
V. H.

Los cursos de formación sobre el ébola que recibe estos días el personal sanitario en horario de mañanas han ocasionado diversos retrasos en la atención a los pacientes del Hospital Clínico de Zaragoza.


"El personal de Urgencias requerido para la formación no está siendo sustituido como se debe, lo que supone cierto colapso en las actuaciones sanitarias que se están dando", denuncian desde el sindicato médico CSIF-Aragón.


Así pues, médicos y enfermeros de este centro hospitalario reciben a lo largo de la mañana diversas clases prácticas de 20 minutos con los trajes de protección individual (EPI) que se necesitan para tratar a pacientes con ébola.


A juicio de este sindicato, los cursos de formación -que se imparten al personal en grupos de tres en tres- son "totalmente insuficientes" para aprender y mecanizar el manejo de los trajes.


"Hay gente que tiene dudas. Ayer se pegaron una hora tres personas sin ser sustituidas y hoy ha estado sola una enfermera en Medicina Interna durante tres horas", critican desde el CSIF.


Las mismas fuentes reclaman que, para evitar estos retrasos en la atención hospitalaria, el personal que asista a los cursos de formación en horario de mañanas sea sustituido en su totalidad por otros profesionales del Salud. De esta forma -subrayan- no se acentuarían los "colapsos" que se están produciendo por las tardes en este centro sanitario.


Del mismo modo, piden que se incremente la duración de estos cursos y critican que se "disfrace" de "formación" lo que consideran que es "pura información protocolaria".


"Veinte minutos es lo que cuesta poner y quitarse el traje y la persona que está supervisando no tiene tres ojos. Lo peor es que se obliga al personal a firmar un documento en el que se dice que ha recibido formación y esta es totalmente insuficiente", sentencian las mismas fuentes.


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