Cartas al director de HERALDO: Paradas de autobús sin marquesina

Paradas de autobús sin marquesina

El Ayuntamiento de Zaragoza, o la empresa correspondiente, está cambiando marquesinas obsoletas por otras más modernas. Sin embargo, todavía quedan muchas paradas de autobús desprovistas de ellas. 

Si comprar unas nuevas para todos esos lugares, donde los ciudadanos esperamos el bus a la intemperie, es costoso, ¿por qué no se reutilizan las viejas? No sé qué harán con ellas, quizá tienen ya un destino, pero como ciudadana de a pie, no tengo por qué saberlo. Sí me doy cuenta de que el frío y la lluvia los soportamos al raso. Hace un tiempo que se alargó la parada del 21, bien en una de sus aceras, todavía está la información en una de estas paradas provisionales que se colocan cuando hay obras, y por supuesto sin marquesina. En esa esquina, las inclemencias se siente sobremanera. Por otro lado, cruzo casi a diario el puente de Piedra, utilizando el carril bici desde más arriba del paseo Echegaray. En el cruce de dicho puente y a ambos lados hay una hermosa señal que indica la obligación de atravesarlo, tanto bicicletas como patines, a pie. Según mis observaciones, tan sólo dos o tres personas de cada diez hacemos lo correcto, y si se le recriminas a otro usuario, lo que nos llevamos es una contestación grosera. Una buena multa seguro que acababa con este problema. No he visto nunca a ningún policía recriminando a estas personas. Lo que ocurre, que así somos todos tratados por igual, porque por desgracia las cosas que se hacen mal se ven mucho más que las actuaciones correctas. Y muchas personas tienen la mala costumbre de generalizar esas actuaciones incorrectas.

Josefina Palos Bernad. ZARAGOZA

Isabel Guerra, audacia y autenticidad

Recientemente he visitado la exposición de Isabel Guerra en el Museo Goya, con vídeo y entrevista incluidos. Me ha gustado, pero sobre todo me ha parecido audaz y admirable el cambio de estilo, de técnicas y de temas desarrollados. La verdad es que la artista rezuma autenticidad por todos sus poros y dentro de los esperados, o no, mensajes destacaría el bien, la belleza y la verdad, igual a Dios. A fin de cuentas es una profesional del tema, deberíamos esperarlo de antemano. Solo un pero, como hacen los jueces, los tenderos o los economistas, el título de las obras es demasiado largo y con menos palabras se podría decir lo mismo. Y es que el objetivo de la exposición es contemplar, sentir, disfrutar con lo que ves. La obra es suficiente, tiene más que suficiente entidad y personalidad propia para que no te despisten las palabras. De todas formas, merece la pena, y mucho, ir a verla.

Carmen Aubá Estremera. ZARAGOZA

Hacienda y el caso Koldo

A la mayoría de los contribuyentes, que pagamos nuestros impuestos a la Agencia Tributaria, no deja de sorprendernos que esta institución, considerada como una de las más serias, eficaces y, llegado el caso, contundentes, haya podido pasar por alto que un contribuyente, empresario e implicado en la trama Koldo, no presentase declaración alguna ante este organismo desde 2015. Y no saltaron las alertas de la Inspección en cuanto al supuesto manejo de tanto dinero público. También sorprende que, siendo un organismo público tan eficaz para el control de movimientos de dinero público en pequeñas cantidades, pueda existir tanto fraude fiscal, tanto lavado de dinero y tanta fuga de capitales a Dios sabe dónde. Esto nos lleva a la eterna duda, ¿Hacienda somos todos?

Carlos Pradas Escalona. ZARAGOZA

Perder el apoyo

Las peticiones de agricultores y ganaderos han parecido acertadas a gran parte de los españoles, y han gozado de su benevolencia por las interrupciones del tráfico que han ocasionado sus tractores, incluso contemplados con simpatía en el entorno urbano. Es indudable que se trata del primer sector estratégico, pues proporciona alimentos, por lo que debería gozar de la atención debida por parte de la Administración. Pero las protestas se están prolongando y aumentando de intensidad. Lo ocurrido el día 1 frente a la Aljafería es absolutamente censurable. Ver a una muchedumbre enloquecida, apoyada por un enorme tractor, empujando a unos pocos policías que les impedían el acceso a las Cortes no se parece a la imagen que tenemos de un agricultor o ganadero. Ese tipo de acciones quizá no les quiten la razón, que está en el origen de sus peticiones, pero seguramente harán que la sociedad les vaya retirando su apoyo. Ni los ciudadanos que se ven impedidos de circular libremente ni los policías, a punto de ser atropellados, tienen en su mano las soluciones, por lo que no deberían ser objeto de sus iras. Si esos chalecos amarillos pierden el apoyo de la población proporcionarán a los gobiernos, nacional y europeo, los argumentos para no atender sus razonables peticiones.

Luciano Ibáñez Dobón. ZARAGOZA

Tala de un árbol singular

Hace unos días se me encogió el alma cuando vi que habían talado una inmensa, magnífica, hermosa y sana acacia a la altura del número 33 de la calle Santiago Rusiñol, en el zaragozano barrio de Las Fuentes. El árbol tenía muchas décadas de historia, incluso podría ser centenario. Ahora solo queda un enorme tocón, sombra de la vida que albergó. ¡Cuántos infantes, ya ancianos, vio pasear calle arriba, calle abajo, a lo largo de su prolonga existencia! ¡Qué belleza emanaba de su figura majestuosa, protectora y bienhechora! Puede intuirse que la razón por la que ha sido abatido es el comienzo de las obras de construcción de viviendas en el solar situado enfrente. Si fuere así, me pregunto: ¿era imprescindible cortarlo? Entiendo que haya que eliminar los árboles enfermos o que supongan un peligro, pero no parecía el caso de esta querida acacia. La calle Rusiñol está catalogada por el Ayuntamiento dentro de los llamados conjuntos urbanos de interés. De forma que la construcción de nuevos edificios y la rehabilitación de los existentes están sujetas a normas para la protección del entorno urbanístico. ¿No forman parte de dicho entorno los árboles monumentales que allí se encuentran? Si se protegen las fachadas y la estética de la calle, ¿no deberían protegerse estos ejemplares singulares?

Alberto Pisa Allué. ZARAGOZA

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