Redactor de HERALDO DE ARAGÓN en la sección de Deportes

Compañía en las ondas

Compañía en las ondas
Compañía en las ondas
Pixabay

No sé cuántos días mundiales de la radio hay a lo largo del año, pero pocos me parecen. Incluso aunque fueran 366, pocos me parecerían. No miento si digo que paso el 80% del tiempo libre escuchando pódcast, bien sean de actualidad, conversacionales (con cierto picante), deportivos, históricos, cinematográficos... 

Religiosamente pago el audioquiosco de Ivoox –aunque su servicio funcione a trompicones– y estoy suscrito a una treintena de programas.¿Botones de muestra? ‘Documentos RNE’, ‘Grandes infelices’, ‘Sofá sonoro’, ‘El descampao’, ‘Amargor’, ‘Sucedió una noche’, ‘Criminopatía’, ‘Arte compacto’, ‘Aquí hay dragones’, ‘AD Basket’, ‘Las auténticas señoras de la calle Lista’, ‘Las hijas de Felipe’, ‘Arsénico caviar’...

Podría seguir con ‘¡Ay, campaneras!’ –ese bonito homenaje a la copla–, ‘Epsa’ –el decano de la cultural ‘underground’– o todos los que hacen los amigos de El Extraordinario con sus ‘Crímenes, el musical’ a la cabeza, en donde son capaces de contar asesinatos y parricidios con un fondo de salsa y reguetón. Suena extraño, lo sé, pero escúchenlo, es una delicia.

Uno de mis disgustos más tontos y repentinos fue cuando recientemente cambié de móvil y no me di cuenta de que el nuevo no tenía conexión para cascos: no permitía escuchar la radio en directo. Tocó morir al palo de los inalámbricos y de las aplicaciones cadena por cadena, que siempre arrastran retraso respeto a la emisión real. El caso es que el día mundial de la radio, el día D, fue el pasado martes, pero el miércoles fue mi San Valentín con las ondas y ayer mi momento de más íntima felicidad fueron las notificaciones de que había episodios nuevos de algunos de mis programas preferidos. Así, todo el año.

(Puede consultar aquí todos los artículos escritos por Christian Peribáñez en HERALDO)

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión