La empecé sin mucho interés. No había visto nada de ‘los Javis’. Sólo los conocía por su participación en concursos y de alguna entrevista, y me parecía difícil sintonizar con ellos, ni por edad ni por nada. En el arte, a veces, quien incluso te cae mal es el más capaz de impactarte.

Efectivamente, me ha fascinado ‘La Mesías’ y la recomiendo con entusiasmo si acceden a Movistar. Le han dedicado tres años y se nota, bien aprovechados. Siete capítulos de una historia profunda, compleja.

He leído titulares simplones de quien supongo tuvo que escribir algo antes de verla: "La serie anti Opus", por ejemplo, o quien la anuncia como la biografía del conjunto musical de niñas con mensajes ultracatólicos, que efectivamente existió.

‘La Mesías’ explora mucho más: el dolor de dos hermanos que afrontan de distintas maneras un pasado terrible de aislamiento y fanatismo, el horror de la madre que nadie querríamos haber tenido, la muy difícil recuperación de los traumas de una infancia y adolescencia sometidos a unos dementes, la búsqueda de tu identidad, la música como escape, la libertad.

Y todo contado con una conseguida mezcla de géneros, una serie de máximo riesgo que nunca patina ni cae en la caricatura, nada sobra en ocho horas de una producción espectacular y meticulosa. El guión es brillante, pero la angustia permanente en los rostros de Roger Casamajor o Irene Balmes cuentan más que cualquier texto.

Cuando todos los actores lucen a tan alto nivel, por ejemplo el cantante radical y antisistema Albert Pla transformado magistralmente en un beato apocado, mucho dice de los responsables. Lola Dueñas, que ha actuado a las órdenes de Almodóvar o Amenábar, declara que ‘los Javis’ son "los mejores directores con los que he trabajado".

Si alguien mantiene prejuicios contra las series españolas, ya sobraban los motivos para olvidarlos, pero sólo en este otoño, aparte de ‘La Mesías’, a mí me han encantado ‘El cuerpo en llamas’, aquí sí con un caso real: el crimen de la guardia urbana, y ‘Poquita fe’ una divertidísima comedia con capítulos de quince minutos de humor inteligente.