Bosques zaragozanos

Bosques zaragozanos
Bosques zaragozanos
POL

A veces hay lectores que me escriben directamente un correo electrónico reaccionando a alguno de los artículos publicados en HERALDO. 

Unos manifiestan su desacuerdo y otros lo contrario. No ocurre todas las semanas, pero sucede y anima. Es un modo de constatar que hay alguien al otro lado. Lo raro es que se repita el intercambio. En esta ocasión, quiero mencionar a Sara F. A., quien prefiere que no mencione sus apellidos.

La iniciativa del Bosque de los Zaragozanos es prometedora, pero hay que hacer bien las cosas

En junio escribió para compartir su preocupación por los bosques después de leer ‘Re(d)visar Natura 2000’. Quería señalar la contradicción que constata en el Ayuntamiento de Zaragoza respecto del tema medioambiental. Para ella, la Corporación municipal parece sensible. Ponía como ejemplo el ‘Bosque de los Zaragozanos’. Pero, por lo que intuí en su correo, lo percibe como puro maquillaje y observa unas cuantas contradicciones. Considera que es más importante cuidar lo que se tiene antes que nada. Me decía en junio: "Dentro de Zaragoza tenemos un bosque urbano natural de gran valor que corre peligro. Se trata de las riberas del río Huerva. En el tramo comprendido entre el puente del Parque Grande hasta Gran Vía". Le preocupa cómo se va a intervenir en la zona. Presagia lo peor. Y eso lo deduce tras ver el resultado de la rosaleda del Parque Grande. En esto, como en todo, hay opiniones para todos los gustos. Sin embargo algo de razón tiene, no vaya a ser que para arreglar las riberas primero destrocen lo que hay y luego se llene de cemento.

El jueves pasado Sara volvió a escribirme inquieta por el mismo tema. En su mensaje incluía un par de ‘recortes’ del propio HERALDO y una foto. El primero es de 17 de septiembre, donde se mencionaba la concesión al Ayuntamiento de Zaragoza de una ayuda del Gobierno central para la "restauración de ecosistemas fluviales y la reducción del riesgo de inundación en entornos urbanos". Resulta que se recibirán "1,6 millones para la restauración paisajística-hidromorfológica del Huerva". El segundo, del sábado 24. Una carta al director firmada por Agustín García Villacampa y titulada ‘El bosque muerto de los zaragozanos’. Donde muy acertadamente se describe el fiasco del camino de Jarandín, señalando que "la inmensa mayoría de los plantones ya están muertos". Y el autor pregunta si hay "algún plan riguroso por parte del Ayuntamiento para mantener" lo plantado. Coincide con la premonición de Sara. Deseando que "su ejecución sea lo más eficaz posible y que no quede con el paso de los años en una campaña más de imagen, buenas intenciones y palabrería hueca".

Y no hay que olvidarse de cuidar y proteger los bosques naturales que ya existen en la ciudad, como los que encontramos en las riberas del Huerva

La foto que adjuntó Sara a su mensaje era de esa misma mañana, tomada desde el ‘puente de los Gitanos’. Y dice: "Después del calurosísimo verano que hemos sufrido y que no ha llovido nada, fíjese cómo están los árboles. Es que parece un milagro de frondosidad y verdor. Esto sí que es un bosque. Un bosque urbano natural". Coincido con ella: necesitamos más árboles y más bosques urbanos. Especialmente en Zaragoza, pero tienen que plantarse con conocimiento y asegurando su cuidado. Si no, es tirar el dinero. Y obviamente, como dice: "Por supuesto que estas riberas necesitan una buena limpieza de vez en cuando de desbroce, retirar lo que se seca, etc. Lo que se dice un buen mantenimiento. Y no se hace. Y también, algunos tramos, sobre todo de la ribera derecha, necesitan ser adecentados, mejorados. Pero nada más. ¡Que no nos hagan algo de diseño, por favor!".

En esto intuye que solo unos pocos se beneficiarán ejecutando la obra y se olvidarán después del resultado. Sara llama a salvar los bosques urbanos y tiene razón. A mi juicio se queda corta. Necesitamos sustituir, mitigar el cemento y conseguir que la iniciativa del Bosque de los Zaragozanos alcance las cifras que se prometen. Suena bien lo que se apunta en la web: "Que Zaragoza sea un referente en sostenibilidad: un entorno repleto de espacios saludables y donde sea posible disfrutar del aire limpio". No basta con plantar 700.000 árboles. Cierto que "estamos llamados a reverdecer la ciudad", pero hace falta talento y talante para conseguirlo. Quienes gobiernan tendrán que tomarse en serio cómo se ejecuta, ¿o qué?

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión