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Helldivers 2: diversión y plomo con amigos y desconocidos matando bichos y robots
Es el nuevo gran éxito multijugador cooperativo, un juego en el que la historia importa poco y todo se reduce a una acción frenética y adictiva.
En ‘Helldivers 2’ la historia que se cuenta importa bien poco. El clásico de los 90 ‘Starship Troopers’ tiene el mismo argumento: la raza humana está amenazada por una invasión alienígena y todas las balas y explosivos son pocos para hacer frente a los agresivos insectos gigantes con los que se topa el jugador.
Como aquella película de culto, este juego es una sátira de tiranía y ultraviolencia, que mezcla toneladas de acción con una nada refinada ironía: la adrenalina del jugador llega al límite, con alguna carcajada en nombre de ‘la libertad y la democracia gestionada’.
Todas las partidas empiezan con un grupo de marines lanzado en cápsulas de despliegue individual sobre un planeta repleto de hostiles. Los enemigos pueden ser los ya mencionados insectos de sangre corrosiva o robots asesinos al más puro estilo de ‘Terminator’.
El jugador tiene disponible un arma principal, otra de mano y un puñado de granadas. Las inyecciones curativas y la munición son limitadas y, además, los cargadores desechados hacen perder las balas restantes: conviene apurarlos. Las naves en órbita y sus letales ataques aéreos añaden un extra de devastación que no viene mal.
‘Helldivers 2’ es un juego con muy buenos gráficos que el jugador apenas podrá disfrutar, dado lo frenético de su combate.
Es muy divertido y, aunque puede resultar repetitivo dado que no hay un hilo argumental que justifique la ensalada de metralla, el hecho de que sea un multijugador cooperativo y lo aleatorio de sus escenarios añaden el aliño perfecto.
