¿Qué ídolo del cine y la música murió el 5 de marzo de 1982 con solo 33 años?

Su figura ha trascendido generaciones gracias, sobre todo, a dos películas y unas cuantas canciones que ha resistido bien el paso del tiempo

'The Blues Brothers' (1980), con Dan Aykroyd y John Belushi.
'The Blues Brothers' (1980), con Dan Aykroyd y John Belushi.
H. A.

El lapidario lema ‘Vive rápido, muere joven y deja un bonito cadáver’ ha tenido demasiados seguidores al pie de la letra en el mundo del espectáculo. Los accidentes, las adicciones, las enfermedades o los suicidios han privado muy prontyo al mundo de un buen puñado de talentos singulares, incluyendo un nutrido grupo de estrellas que dejaron su existencia terrenal a la misma edad: 27 años. Ese terrible club tiene miembros tan conocidos como Jim Morrison, Jimi Hendrix, Amy Winehouse, Janis Joplin, Kurt Cobain de Nirvana. el ‘Rolling Stone’ Brian Jones, el guitarrista Robert Johnson, Chris Bell de Big Star o la cantante española Cecilia.

Por desgracia, no faltan los casos de figuras aún más jóvenes con un fatal desenlace, caso de la cantante Aaliyah (accidente de avión, 22 años) o los actores James Dean (choque de automóvil, 24) o River Phoenix (23). El hermano mayor del hoy popular Joaquin Phoenix, ganador del Oscar al mejor actor por su ‘Joker’), que interpretó al joven Indiana Jones a principios de los 90 y murió en 1993 por una sobredosis letal de heroína mezclada con cocaína (un depresor y un excitante juntos, toda una bomba para el corazón) llamada ‘speedball’. Esa misma combinación acabó once años antes, un 5 de marzo, con otra figura planetaria e indomable en todos los sentidos: John Belushi.

El 50% de The Blues Brothers (le sobrevive Dan Aykroyd) alcanzó la inmortalidad artística solamente dos años antes de su muerte física en el famoso complejo residencial Chateau Marmont de Hollywood. La película de los Blues Brothers, embarcados en una misión de Dios para salvar un orfanato de la codicia inmobiliaria, ha dejado una herencia indeleble en forma de banda sonora e icónico aspecto de sus protagonistas: trajes negros, gafas de sol y un número de baile que a día de hoy sigue siendo estelar en carnavales y fiestas temáticas de todo el mundo.

Belushi, empero, ya era toda una estrella desde hacía una década, gracias al brillo exhibido en su cuna artística, ‘Saturday night live’. La consagración como imán de la taquilla le llegó con ‘Desmadre a la americana’ (1978), de John Landis, comedia de ambiente universitario que enfrentaba a dos modos antagónicos de concebir las fraternidades en el campus. 

Su corta vida fue un rosario de excesos en lo tocante a la vida nocturna, con especial incidencia en el alcohol y las drogas, pero aquellos que le trataron de cerca siempre recordaron a quienes quisieran oírles que el John Belushi sobrio fue un ser humano generoso, empático y entrañable, de una velocidad mental increíble y pródigo en destellos de genialidad.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión