Lanuza se rinde a la magia de Guitarrica y Xavier Rudd sobre el mítico escenario de Pirineos Sur
Comida del mundo, artesanía y música han amenizado a un público de lo más variado este segundo fin de semana de Pirineo Sur en el marco de su 30 aniversario.
Son las 17.00 de un caluroso sábado de julio cuando en el pantano de Lanuza comienzan a escucharse los sonidos de percusión y guitarra que indican que las pruebas del concierto de la noche han comenzado. Sobre el escenario, decenas de personas se mueven con rapidez de un lado a otro para que, por la noche, todo salga perfecto. No en vano, se trata del primer ‘sold out’ del fin de semana, con 4.500 entradas vendidas.
Sin duda, el escenario flotante se ha convertido en uno de los predilectos por los músicos que, cada año, recalan en el festival Pirineos Sur. Parece que todo lo que importa ocurre al caer la noche, sin embargo, durante el día son muchos los curiosos que se acercan a ver qué se cuece de las formas más curiosas.
Sobre la 18.00, sobre un flotador en forma de unicornio, llegaban Vanesa Teban, Quique Cabezudo y Silvia Elevesque. “Llevamos viniendo desde que somos críos. Nos hemos quedado sin entradas para Guitarrica y nos hemos acercado a verlo”, admiten. Hay quienes se asoman sobre su tabla de paddle surf o, en este caso; en piragua, como la influencer zaragozana Sara Sánchez (@gina.ginger) y su pareja, Javier Martínez. “Vinimos a Love of Lesbian el viernes. Es un lujo disfrutar a la vez de un concierto increíble y un entorno mágico como este”, afirma.
Ya por la noche, tras el éxito del australiano Xavier Rudd que logró hacer vibrar a un público internacional, un emocionado Álvaro Lafuente, GuitarricadelaFuente; hacía su esperada aparición sobre el escenario. “No sé si es por el pantano, por el entorno o por qué, pero se escucha increíble”, reconoce.
De padres maños y abuelos turolenses, el músico de Benicasim lograba la ovación del público con algunos de sus temas más vinculados a la tierra. “Nunca olvido mis raíces ni de dónde vienen las historias que quiero contar. Este era el último concierto de la gira en Aragón y uno de los que más esperaba este verano”, advierte.
Con una gran representación de su querido Cuevas de Cañart, localidad turolense en la que el joven ha reconocido en numerosas ocasiones se fraguó su sueño de ser artista, el músico hizo alarde de su defensa del folklore y de su gusto por los orígenes de la música tradicional, sobre la cual asegura que: “nunca va a pasar de moda”.
Tras sendos directos, era el momento de disfrutar, por segundo día consecutivo, de Mujeres Bellas y Fuertes Djs. Con el concierto de esta noche de Ludovico Eiunaudi, Pirineo Sur alcanza el ecuador del festival con más de 25.000 espectadores y tres jornadas de ‘sold outs’ junto a la velada protagonizada por Bomba Estéreo.
“Ver a tanta gente llegar al festival y hacerse fotos con nuestro escenario flotante al fondo ha sido la constatación de que la programación de este año ha conseguido conectar con mucha gente nueva y de edades muy variadas”, afirmaba Chema Fernández, director de esta trigésima edición de la cita, que destacaba la buena salud de Pirineo Sur: “Los más de 15.000 espectadores de este fin de semana y los 10.000 del pasado confirman que la evolución y la apertura a nuevos géneros funcionan”.
Ya en el corazón del pueblo, en Sallent de Gállego, nos topamos con el Mercado Internacional, con una zona de puestos en los que destacan la artesanía, con ropa, joyería y cosmética natural, como la que ofrece Miriam Salas de Alme Organic. “Es el segundo año que venimos y es un mes de mucho trabajo, pero una maravilla”, admite. A su lado se encuentra uno de los veteranos, el senegalés Abdou Gueye, que lleva sin faltar a su cita con Pirineo Sur más de 15 años con su artesanía étnica. “Hay un público muy diverso, distinto entre semana y el fin de semana, pero un ambiente buenísimo durante el mes que estamos aquí”, reivindica.
“No hay que irse a Ibiza para vivir un mercado así”
Coronado por sus identificativos toldos de colores, los olores a patatas asadas o piadinas de queso y rúcula, o los aromas a té moruno se entremezclan con el ajetreo del ir y venir constante de visitantes al Mercado, sin duda es uno de los puntos más concurridos de Pirineo Sur, donde confluyen historias y perfiles de lo más diversos.
Llegadas desde Pamplona encontramos a Carlota Martín, Ana Cañas, Irene Artal y Maite Mendoza, que celebran la despedida de soltera de ésta. “Venimos directas de San Fermín a disfrutar de este ambiente tan multicultural y chulo. No hay que irse a Ibiza para algo así”, reivindican. También Gustavo Posadas y Andrea López, seguidores de Ludovico Eiunaudi llegados de Tudela, que han aprovechado para “hacer una ruta por la montaña y disfrutar del festival”.
