LITERATURA. OCIO Y CULTURA

Cristina Fallarás desmonta el mito romántico y la locura de la reina Juana

La escritora, autora de otra novela sobre María Magdalena, presenta el sábado en Zaragoza 'La loca' con Marta Garu

Cristina Fallarás trabaja en una trilogía sobre las mujeres.
Cristina Fallarás trabaja en una trilogía sobre las mujeres.
Vanesa Esteban Pino.

Cristina Fallarás (Zaragoza, 1968) es una superviviente y un ciclón. Su vida tiene algo de torbellino incontenible: a veces parece enojada con el mundo y el machismo, a veces se monta en el caballo de la rabia y se lo lleva todo por delante. Ha hecho y hace muchas cosas como si en su ADN llevase una divisa o una condena: “Jamás pasarás inadvertida”. En la literatura llamó la atención por sus novelas de trasfondo negro o terrible, por sus personajes desesperados y sus historias extremas. Desde hace un tiempo, hay algo que parece no darle tregua y cada uno de sus libros es como un salto al vacío. Lo fue su novela de María Magdalena y lo es la narración que presenta hoy, a a las 12.00, en la librería La Pantera Rossa en compañía de Marta Garú, redactora de sucesos de HERALDO: ‘La Loca’ (Ediciones B).

“He estudiado más que en bachillerato y toda la carrera juntos para escribir estos libros. Si enmiendas un poco la Historia, no puedes cometer errores de nuevo. Estos libros me han llevado a reflexionar sobre el fracaso de la historia de las mujeres y sobre mí misma. Creo que en mis últimas novelas abordo lo que somos y, sobre todo, lo que soy”, dice.

“¿Qué que me atrajo de María Magdalena? Su historia pertenece al relato fundacional de Occidente: el Nuevo Testamento. Me inspiré en el western, donde las mujeres no tienen ningún peso. Y el caso de Juana la Loca es de las cosas más increíbles que hemos vivido en la historia de España”, dice. Sostiene la autora, como algunos historiadores y cronistas, que la hija de Fernando el Católico e Isabel de Castilla, esposa de Felipe el Hermoso y madre de Carlos V, no estaba loca. “Todo lo contrario. Fue una mujer formada, inteligente, con estudios. La tergiversación es impresionante y obedece al mito romántico y a la locura de amor. Eso lo captó nuestro paisano Francisco Pradilla, pero la verdad es otra. No estaba loca y fue objeto del fuego cruzado de la ambición de su padre y su marido, y luego también de su hijo. No le dejaron reinar”, explica Cristina Fallarás y alude a varios historiadores, testimonios, manuscritos y epístolas.

“Fue la primera reina de España. Isabel la Católica no se fiaba a su marido y quiso que gobernase ella. Y fue a partir de ahí cuando la encerraron bajo la acusación de loca, la acusaron de ser una histérica por amor y deseo. Cuando empecé a ver todo eso, los datos, las fuentes y la injusticia histórica tan monumental casi caigo de culo. No estaba loca. Y eso se vio en Borgoña y en España”, dice. Cuando se murió Felipe el Hermoso, lo embalsamó, lo metió en un recipiente de plomo y luego lo metió en ese ataúd. Estaba embarazada de algunos meses, y lo paseó por Castilla. “También fue un acto consciente. Premeditado. De rebeldía. Evidentemente se casó por amor, estuvo enamorada de Felipe el Hermoso, pero no pudo perdonarle sus infidelidades. Y dejó de creer en él. Cuando se murió él, aprovechando la ley que decía que una mujer no puede volver a casarse si no entierra a su marido, rechazó a sus pretendientes, especialmente a Enrique VII de Inglaterra, que siempre quiso casarse con ella”.

El rey la encerró en un convento de las Clarisas , estuvo casi 50 años, y le puso dos centinelas que la maltrataron y la golpearon, explica Cristina Fallarás. “Fue objeto de maltrato físico, económico. Se la aisló de sus amigas y se la despojó de casi todo, y lo peor, lo más intolerable es que se la tildó de loca. Nada más lejos”, dice Cristina Fallarás, que ya ha iniciado la última novela de su trilogía de las mujeres. “La próxima es la historia de una mujer anónima desde una visión un tanto apocalíptica”.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión