Jonathan Rebouillat expone sus animales de papel en el Museo del Origami
El creador de Grenoble es un observador de la naturaleza que se pasa horas y horas viendo mamíferos y pájaros.
Jonathan Rebouillat (Grenoble, 1989) tiene una vida muy historiada. Vivió parte de su niñez en China, estudió español, alternó su residencia en España y Francia, y un día emprendió la aventura por tierras de la Amazonía. En 2014 se asentó en Ecuador y vivió con varias tribus en contacto con la naturaleza. Aprendió lenguas indígenas y también a doblar o plegar papel. En 2016 regresó a su país dispuesto a dedicarse, entre otras cosas, al origami.
Ayer presentó en el Centro de Historias, en el Museo del Origami, la muestra ‘Papel y agua, curvas y vida’, un montaje muy elegante y sutil de sus piezas de animales. Esencialmente, lo que hace Rebouillat son los animales de un bestiario particular, suspenso en la belleza de la manufactura y en la búsqueda de la armonía.
"Mi primera creación fue un gorila. Estaba doblando el papel, mirándolo entre mis dedos, y en un momento, fue el papel el que me estaba mirando. ¡El encuentro fue sensacional! Desde este momento estoy en un proceso de creación personal", dice el artista. Utiliza papel de acuarela que moja con agua, y hace curvas que se mantendrán al secarse.
"Me atrae la simplicidad y la búsqueda de la esencia. Paso mucho tiempo observando los animales que me rodean, sobre todo pájaros y mamíferos. Eso es la primera etapa de mi proceso de creación: horas y horas escondido en el bosque, con binoculares para ver quien aparecerá", ha dicho este artista que afirma que "el origami es una manera de exprimir la emoción que tuve durante el encuentro". En cada pieza anhela ofrecer "un homenaje a la belleza de la vida".
La vida de Jonathan Rebouillard ha vuelto a cambiar. Acude a convenciones de origami de diversos países de Europa como Francia, Italia y España; en Zaragoza estuvo en 2020. Se ha empeñado en establecer lazos entre su arte y la ecología. Declara: "Soy padre de une hija de siete meses, que pasa mucho tiempo conmigo escuchando el canto de los pájaros. Cuando le doy un cuadrado de papel, ¡solo quiere comérselo! Pero un día podrá empezar a doblarlo, y espero que sienta entre sus dedos latir corazones de papel". Su muestra permanecerá abierta hasta el 6 de mayo.
Este sábado se inaugurará la muestra del artista nipón, Akio Maruyama, ‘Washi ningyou’ (‘Muñecas de papel). El artista, nacido también en 1989, presenta una selección de estas muñecas tradicionales de la provincia de Tokio que representan mitos, símbolos y motivos de la cultura tradicional.
