Han sido 30 años de trabajo, de construcción de un proyecto a medias entre sueño y realidad. La idea de sostener una formación de música de espíritu historicista utilizando solo instrumentos de época, que se consolidó hasta convertirse por unos años en gran orquesta, para tocar en las salas más importantes de todo el mundo. Al Ayre Español, formación musical fundada en Zaragoza en 1988, cumple tres décadas en los escenarios con una gira que ya ha empezado (el lunes actuó en Varsovia), que pasará por Hamburgo, Berlín y El Escorial, y que recalará el próximo día 12 en la Sala Mozart del Auditorio de Zaragoza. Además, culminará las celebraciones con un nuevo cedé que se publicará en primavera.

Eduardo López Banzo, director, fundador y alma máter de Al Ayre Español, define estos 30 años como «un proyecto en dos etapas, de 15 años cada una. Hasta 2004, sin ayudas ni en Zaragoza ni en el resto de Aragón. Un prestigio inicial que fue necesario labrar en solitario. Después, y gracias al apoyo de Miguel Ángel Tapia a través del Auditorio, y también del Gobierno de Aragón, hubo un importante respaldo del proyecto, que ayudó no solo a consolidar Al Ayre Español, sino a crear una orquesta con la que hemos podido actuar en importantes escenarios». Y en ese tiempo, con respaldos morales, como el Premio Nacional de Música concedido en 2004 «o el honor de recibir en 2011 del Ayuntamiento de Zaragoza el título de Embajador de la ciudad», recuerda López Banzo.

Al Ayre ha destacado por sus interpretaciones de José de Nebra, José de Torres o Sebastián Durón, así como de Händel, Bach o Mozart. Ha actuado en salas como la Musikverein de Viena, la Gewandhaus de Leipzig, Konzerthaus de Berlín, la Librería del Congreso, en Washington, así como el Teatro Real o el Liceo.

Son 30 años en los que, además, se cierra su larga etapa como orquesta residente en el Auditorio de Zaragoza. En parte, por la gran dificultad que supone sostener un grupo tan numeroso de músicos: «Llevar una orquesta de 50 o 100 personas es caro y muy costoso. Crear ese proyecto fue más debido a estímulos externos que a una decisión propia –asegura el director–. Personalmente, me siento más a gusto en un pequeño grupo de música de cámara, donde nos mueve únicamente el placer de tocar música, donde se da un diálogo interno de igual a igual que difícilmente se alcanza en una orquesta».

Una nueva etapa

Dice Eduardo López Banzo que volver a los orígenes a veces también permite recuperar la ilusión. «Y no es que me haya desencantado esa etapa como orquesta, porque he disfrutado muchísimo y seguiremos realizando grandes conciertos, aunque de manera más puntual. Pero una orquesta da muchos quebraderos de cabeza. Un director me dijo una vez que el 70% de su tiempo eran los negocios y solo el 30% era música. Ahora, como grupo de cámara, yo dedico el 70% a la música y el 30% a los negocios. Y eso me ha devuelto mucha ilusión y energía, y quiero seguir así».

Al Ayre Español actuó el pasado lunes en la sala de la Filarmónica Nacional de Varsovia, con un programa dedicado a las ‘Sonatas Opus 2’ de Georg Friedrich Händel, que se grabó ayer y que se publicará en primavera como álbum, a través del sello Challenge. El próximo sábado 10 de noviembre actuará en el Real Coliseo de Carlos III de El Escorial y el día 12, en el Auditorio de Zaragoza.

Pero el aniversario de Al Ayre Español continuá en diciembre:el día 5 la formación de López Banzo llevará a la Laeiszhalle de Hamburgo un programa en torno a las antiguas celebraciones de Navidad en la España del siglo XVIII. Este mismo concierto se ofrecerá en la Filarmónica de Berlín el día 10 y será grabado por la emisora alemana NDR.