Es una pesadilla recurrente para cualquier comisario de exposiciones: la imagen de un visitante poco habilidoso que arruina una obra de arte al hacerse una foto. La escena se ha hecho real en los Urales rusos, en la localidad de Ekaterimburgo. Allí, dos jóvenes dañaron un cuadro de Salvador Dalí al provocar su caída cuando trataban de inmortalizarse junto a la obra. Una pintura, por cierto, de la serie de Los Caprichos del artista gerundense y que estaba situada junto a un aguafuerte del genio de Fuendetodos.

Ocurrió el pasado sábado en el centro cultural Glavny Prospekt de la localidad rusa y fue grabado por una cámara, tal y como publicó este jueves en su cuenta de Twitter el periódico ‘Izvestia’. A causa de la caída, el lienzo de Dalí resultó dañado, no está claro en qué medida, mientras que en el caso del grabado de Goya los desperfectos se limitaron al marco y al cristal. A continuación, las jóvenes huyeron asustadas, según explicó otro diario, el ‘Komsomólskaya Pravda’, aunque posteriormente fueron detenidas.

En el vídeo no se precisa, en todo caso, en qué medida el incidente fue causado por una conducta inapropiada por parte de las autoras o bien por una colocación defectuosa del panel que soportaba las obras. La agencia Tass apuntó este viernes que fueron un grupo de jóvenes las que estuvieron involucradas en el suceso. De hecho, cita a un trabajador del centro, según el cual estas personas estaban “actuando de forma inadecuada”. Según ha informado el 'Komsomólskaya Pravda', la Policía rusa ha descartado abrir un proceso penal contra las jóvenes al no apreciar delito.

La exposición, que fue inaugurada el pasado 5 de octubre, continúa su actividad con normalidad. Además de la serie de Los Caprichos hay ilustraciones de Dalí sobre El Quijote, la ‘Divina Comedia’ y la Biblia, entre otras.

La serie de Dalí sobre Goya se pudo ver en Zaragoza en la primavera del año pasado, en una gran exposición que acogió el Museo Goya Colección Ibercaja.

No es el primer suceso de estas características que registra un centro museístico ruso. ‘Izvestia’ recuerda un episodio registrado en mayo en la Galería Tretyakov en Moscú, cuando un hombre dañó una pintura de Ilya Repin, ‘Iván el Terrible y su hijo’. El autor, Igor Podporin, rompió una valla que protegía la obra y arruinó el lienzo. Inicialmente alegó que estaba borracho, aunque después cambió su versión.