La Puebla de Castro se rinde a las charangas

La festividad de San Roque empezó con la misa mayor en la ermita del patrón y la bajada de la imagen.

Las charangas tras bajar ayer de la ermita del santo, uno de los actos más esperados de las fiestas.
La Puebla de Castro se rinde a las charangas
A. G.

El problema con el suministro de agua, en precario por el bajísimo nivel del pantano de Barasona desde donde se surte el pueblo, no ha enfriado los ánimos de los vecinos y visitantes de La Puebla de Castro que ayer despidieron a unas intensas y concurridas fiestas en honor de San Roque. Vecinos, veraneantes y numerosos visitantes se han dado cita estos días en la localidad ribagorzana para disfrutar de un amplio programa de actividades en el que se han sucedido propuestas religiosas, deportivas, culturales, gastronómicas, lúdicas y, sobre todo, musicales.


Después de un par de jornadas, las del anterior fin de semana, calentando el ambiente con actos como el partido de solteros contra casados, el torneo de frontón o la fiesta de la cerveza, el programa de las fiestas arrancó el pasado día 12 con una yincana para jóvenes y adultos y una animada cena de hermandad.


Fue un excelente inicio para unos festejos populares y concurridos como pocos en Ribagorza, que se intensificaron a partir del sábado con el ‘pregoné’, el chupinazo y el pasacalles musical. Se celebró también un vermú popular, una marcha cicloturista y empezaron las primeras sesiones de baile, que se repitieron con notable éxito el domingo y el lunes.


El ambiente festivo se incrementó el domingo y el lunes con numerosas propuestas y llegó a su punto culminante ayer martes, festividad de San Roque, que comenzó con la misa mayor en la ermita del santo patrón y la posterior bajada de su imagen, acompañado de cánticos, hasta la iglesia de Santa Bárbara en el que es uno de los momentos más queridos, emotivos y esperados por los habitantes del lugar.


Ya por la tarde, los más pequeños disfrutaron de lo lindo con un parque infantil instalado en el frontón y algo más tarde, en el mismo escenario, los mayores tomaron el relevo con una fiesta de la espuma que se ha convertido en clásica del programa.


La degustación, tras el visto bueno de los cocineros, de una gran paella popular ‘fin de fiestas’, la entrega de las placas de reconocimiento a las personas de la tercera edad homenajeadas este año y a los ganadores de los diferentes concursos festivos, un animado festival de jotas que corrió a cargo del grupo Antología Aragonesa y un gran castillo de fuegos artificiales culminado por una gran traca supusieron el colofón de la fiesta.

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