El metro de Barcelona inaugura un nuevo trayecto con el mural del aragonés Ángel Orensanz

Cinco meses después de que se iniciaran las obras para preservar y "realzar" el nuevo vestíbulo que conecta las líneas 3 y 9 del metro de Barcelona, el Ayuntamiento de la ciudad condal inaugurará este viernes las esculturas del nuevo trayecto, entre las que se encuentra el famoso mural 'Artes, Ciencias y Letras', del escultor aragonés Ángel Orensanz.

Ubicada en la estación Zona Universitaria de la línea L3, esta obra "representa una parte del patrimonio artístico y cultural español que debía ser respetada", motivo por el cual expertos en patrimonio del Ayuntamiento decidieron modificar parte del proyecto de conexión entre ambas líneas -que ponía en peligro el mural del escultor oscense- para preservar y "realzar" dicha obra en el nuevo vestíbulo diseñado por la arquitecta Carmen Pinós.

El artista oscense, muy emocionado por la presente inauguración de sus esculturas, asistirá este viernes al evento, al que acudirán también diversas autoridades del consistorio barcelonés y miembros de la Generalitat de Cataluña. 

"Esta obra era muy conocida ya en Barcelona, pero estoy convencido de que ahora va a serlo mucho más", confiesa agradecido Orensanz, quien relata una "divertida" anécdota que le sucedió este miércoles al visitar su mural. "Hay una señora de Teruel, que trabaja en el metro, que se me acercó y me dijo que no dormía de la impresión que le provocan mis relieves", comenta el autor, "impresionado" por la admiración que despierta su obra.

El mural 'Artes, Ciencias y Letras', como gran parte de sus esculturas, fue realizado por el artista oscense en Zaragoza, y se expuso por primera vez en 1975 con motivo de la inauguración de la línea L3 del metro de Barcelona. "Los relieves nunca los pude realizar en la ciudad condal, aunque hay muchos míos. La fachada de la Universidad Autónoma, por ejemplo, se hizo en Casetas; y para este relieve, en concreto, iba en ocasiones a un taller de Zaragoza a cortar el hierro, pero me decían que nunca se había hecho eso y que solo hacían balcones de obra para pisos nuevos", recuerda el escultor, afincado en Nueva York.

En este mural que rinde homenaje a los más grandes talentos del mundo del arte, las ciencias y las letras, se ven representados rostros del panorama nacional e internacional, como Einstein, Picasso, Ramón y Cajal, Velázquez, Beethoven y Oppenheimer. Pero también los de aquellos que, en palabras del propio artista, "eran queridos por todos": como es el caso de Machado, Gaudí o del también oscense Joaquín Costa.

Tras la inauguración de este viernes a las 10.45, Orensanz regresará a Francia para trabajar en un nuevo proyecto cuyo soporte será la nieve. "Me gusta trabajar sobre ella porque me recuerda al papel de dibujo. Hay que trabajar también para uno mismo esos valores que luego se adaptan en exposiciones, fotografías y documentales", subraya el artista.

Por el momento, la preservación de este emblemático mural del metro de Barcelona supone para él un "revulsivo", el reflejo del cariño de una ciudad y la inmortalidad que le otorga el arte. "La estancia de cualquier persona en cualquier sitio está sustituida por el olvido, pero si el arte es arte como tal, que el tiempo no lo arruine", defiende el artista. 

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