Con una "ley integral para la protección de los menores en internet", el Gobierno quiere evitar que la pornografía de internet malogre las mentes de los jóvenes, según anunció Pedro Sánchez en una entrevista con el diario 'El País'. No adelantó, sin embargo, el contenido ni los puntos de esa legislación, aunque sí que será un "acuerdo de país", por lo que no se prevé que se apruebe a corto plazo.

Lo que sí podría ser más expedito es otra medida para el mismo fin: "la creación de dispositivos que impidan el acceso a esos contenidos pornográficos a los menores de edad", dijo Sánchez, que aseguró que parte del trabajo estaba adelantado y en manos de la Agencia de Protección de Datos y la Fábrica de Moneda y Timbre. Tampoco adelantó detalles ni la naturaleza de este mecanismo de verificación de edad. Por omisión, no hay sobre la mesa una normativa que obligue a las tecnológicas a ser proactivas, lo que deja la efectividad de la implementación en manos de los usuarios. O mejor dicho, sus padres.

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El porno de Pornhub y otras web tendrá que cumplir nuevas reglas en Europa

Esta acción que se espera para este verano estaría en consonancia con lo aprobado por la Comisión Europea para las web de vídeos porno con más tráfico, en la que se hace más estricta su vigilancia y se bloquea la permisividad con el acceso de los menores de edad. Está vez sí con el foco puesto en el desarrollo de los proveedores, a los que se les obliga a poner los muros necesarios.

La regla europea entrará en vigor este febrero, pero sólo afectará a las tres grandes plataformas de pornografía mundial, como Pornhub, Stripchat y Xvideos, con más de 45 millones de usuarios mensuales cada una en la UE.

Una tercera norma anunciada por Sánchez para evitar esta "epidemia" es la formación y la educación. Una "estrategia multidisciplinar desde el ámbito de la educación, de las competencias digitales, también en el ámbito de la igualdad", reproduce 'El País'. Se hace eco así de un reclamo repetido por asociaciones de víctimas, padres, maestros y feministas. Otros gobiernos europeos, como Francia, también han anunciado su intención de legislar sobre las web porno.