Ciudades españolas comparten con otras sus iniciativas más vanguardistas

Cerca de veinte ciudades y municipios españoles ponen en común sus iniciativas más vanguardistas en el llamado 'Atlas del Cambio', una herramienta donde estos entes locales reflejan que tienen un "modelo compartido de país" diseñado desde la "proximidad".

De esta forma ha sido presentada por algunos de sus promotores este repositorio "pionero" en España, en un acto en la Facultad Ciencias Sociales de Zaragoza, al que ha asistido el alcalde de la ciudad, Pedro Santisteve, y la consejera de Derechos Sociales, Luisa María Broto.

El 'Atlas del cambio' surgió de un movimiento municipalista con el objetivo de poner en común todas las experiencias que se estaban llevando a cabo a lo largo de esta legislatura en las llamadas ciudades del cambio, y a la que se han sumado también otros municipios más pequeños.

En esta página web, ciudades como Zaragoza, Madrid, Barcelona, Palma de Mallorca, Oviedo, Valladolid, Pamplona, Cádiz, Castellón de la Plana, Santiago de Compostela, Jérez de la Frontera, Badalona o Terrasa exponen las iniciativas más destacadas que han impulsado desde el 2015 en sus territorios.

Conforman así un repositorio en continuo desarrollo que hace visible la "transformación política" que se está impulsando en el Estado a través de la política municipal.

Lo explica así el portavoz de Barcelona en Comú, Enric Bárcena, quien ha indicado, en declaraciones a los medios, que los entes locales están marcando la agenda política del país desde una visión social, que pone a las personas en el centro, y que crean ciudades "más democráticas y feministas".

"En el 'Atlas del cambio' se demuestra que tenemos un modelo compartido de país pensado desde las ciudades, no desde el Estado, sino desde la proximidad, desde abajo", ha manifestado.

Barcelona, de hecho, comparte algunas de estas experiencias con la intención de que otros municipios las conozcan y puedan impulsarlas también.

Entre ellas figura la "política estrella" del Ayuntamiento de Barcelona, según Bárcena, que busca ampliar el parque público de vivienda y paliar el déficit de residencia social que existe en la ciudad.

Desde 2018 el consistorio barcelonés obliga a las promotoras inmobiliarias a destinar un 30 % de la vivienda de nueva construcción a uso social, una medida con la que la ciudad calcula obtener unos 400 inmuebles asequibles al año y que ha despertado el interés de otros municipios del área metropolitana.

"Esto ya se practica en otras ciudades de Europa y Estados Unidos", ha precisado.

Zaragoza aporta también las políticas que desde el consistorio consideran que pueden exportarse a otras ciudades.

La campaña de sensibilización 'No es no' sobre el derecho de las mujeres a disfrutar del espacio público libre de violencia, nacida como "iniciativa organizada desde los movimientos sociales" desde 2013 o el modelo de gestión comunitaria de las políticas culturales por parte de los agentes implicados a través de mesas sectoriales son algunas de ellas.

Zaragoza incluye también la experiencia llamada 'Buen gobierno y gestión económica', donde se explica la salida del Plan de Ajuste cinco años antes de lo previsto y la reducción de la deuda en los tres primeros años de gobierno.

Todas las políticas e iniciativas que recoge el 'Atlas del Cambio' tienen algo en común: "se caracterizan por su oposición a los recortes y a las políticas neoliberales, y ponen a las personas por delante", ha puntualizado el portavoz de ZeC, Carlos López.