La Guardia Civil esclarece tres agresiones sexuales a prostitutas cometidas por dos jóvenes

Los dos presuntos agresores, uno detenido y otro en paradero desconocido y con una orden de búsqueda, utilizaban gran violencia.

Polígono industrial de Málaga en el que ejercía la prostitución una de las víctimas
La Guardia Civil esclarece tres agresiones sexuales a prostitutas cometidas por dos jóvenes

La Guardia Civil, en el marco de la operación Guadalhorce, ha esclarecido tres agresiones sexuales sufridas por mujeres que ejercían la prostitución en polígonos industriales de Málaga y Granada.

La investigación se inició tras la denuncia de una mujer de origen africano que fue localizada deambulando por la localidad malagueña de Villanueva del Trabuco a altas horas de la madrugada, quien manifestó que mientras ejercía la prostitución en el polígono industrial Guadalhorce fue amenazada con un arma blanca y llevada por la fuerza por dos individuos que la trasladaron hasta la citada localidad donde fue agredida sexualmente por ambos.

Al día siguiente tuvo lugar otra agresión de similares características a otra mujer que ejercía la prostitución en un polígono industrial cercano a Granada capital y, un mes más tarde, se produjo una tercera agresión a otra mujer en el mismo polígono industrial de Málaga, siendo rescatada la víctima también en Villanueva del Trabuco.

Las tres víctimas fueron atendidas en hospitales cercanos donde le fueron recogidas muestras biológicas y genéticas por el forense de guardia. Todas ellas presentaban cuadros de ansiedad y miedo debido a las agresiones sufridas y a la gran violencia ejercida por los agresores, según ha informado la Guardia Civil en un comunicado.

La primera de las víctimas, aunque inicialmente denunció los hechos, mostró poca colaboración con los agentes, aportando pocos datos sobre las circunstancias en las que se desarrollaron los hechos debido al miedo a sufrir un expediente de expulsión del territorio nacional dada su situación irregular en España y por su situación de necesidad y vulnerabilidad al encontrarse explotada en el ejercicio de la prostitución por parte de organizaciones criminales dedicadas a la trata de seres humanos.

Los indicios llevaron a los investigadores a la certeza que las tres agresiones sexuales habían sido llevadas a cabo por los mismos agresores ya que el modus operandi era el mismo en todos los ataques.

Siguiendo con las gestiones practicadas fue localizada una imagen parcial de escasa calidad del vehículo utilizado por los agresores a la que fue necesario someter a diversos procesos técnicos de ampliación para identificar la marca y modelo del vehículo fotografiado.

Además, para la localización del mismo fue necesario analizar vehículos de dicha marca y modelo, llegando a examinarse más de 13.000 coches, realizando los investigadores un arduo trabajo de filtrados y comprobaciones que se demoraron varios meses hasta su plena identificación.

Por otro lado, se realizaron varios retratos robot de los presuntos autores con las descripciones facilitadas por las víctimas, que fueron difundidos obteniéndose una gran cantidad de información aportada por la ciudadanía, que fue contrastada una a una.

Esta labor de los guardias civiles tuvo sus frutos cuando se consiguió la completa identificación de los dos agresores, dos jóvenes de entre 18 y 24 años, los cuales habían residido años antes en la comarca de Antequera, aunque en el momento de cometer los delitos residían en la provincia de Granada.

Además, uno de los individuos usurpaba la identidad de un familiar para desviar cualquier imputación delictiva, siendo necesario localizar al familiar e identificarlo de forma plena para determinar la verdadera identidad de uno de los autores.

El pasado mes de febrero fue detenido uno de los autores en la localidad de Loja (Granada), encontrándose en otro investigado en paradero desconocido, habiéndose dictado un señalamiento de búsqueda y detención contra él a nivel internacional.

A los agresores se les acusa de los delitos de agresión sexual, detención ilegal, robo con violencia e intimidación, amenazas, usurpación de estado civil y coacciones.

La investigación ha sido llevada a cabo por el Emume (Equipo Mujer-Menor) de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil de Málaga con la colaboración del Equipo de Policía Judicial de Antequera y la Policía Local de Loja.

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