El escándalo del fraudulento máster de la expresidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, abrió un aluvión de investigaciones relacionadas con los estudios de los miembros que conforman el Gobierno de España. La última dimisión debida al plagio de su trabajo de fin de máster tuvo lugar este miércoles a cargo de la ministra de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, Carmen Montón, cuyo puesto desempeña ahora María Luisa Carcedo.

Los dos últimos investigados, a día de hoy en boca de todos, son dos figuras del Ejecutivo en el punto de mira de toda la población española: el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el líder del Partido Popular, Pablo Casado.

Este viernes Moncloa ha dado a conocer que la tesis doctoral del presidente Pedro Sánchez, 'Innovaciones de la diplomacia económica española: análisis del sector público (2000-2012)', con la que obtuvo un sobresaliente cum laude en la Universidad Camilo José Cela, ha superado los análisis antiplagio de dos portales dedicados a detectar esa posibilidad y tras los que se ha determinado el contenido original del trabajo, según el Gobierno.

Estas herramientas son Turnitin y PlagScan, dos plataformas que cuentan con amplias bases de datos y acceso a sitios web. En el caso del Turnitin la tesis de Sánchez ha obtenido un 13% y en PlagScan ha cifrado un 0,96%, cada uno con su metodología, según informa Moncloa.

Estos porcentajes se deben a las citas y referencias obligadas en la elaboración de cualquier documento de investigación que cualquier "software" casi por defecto no puede discriminar a pesar de lo avanzado de su tecnología. Ambos programas, de previo pago, son capaces de identificar plagios en los que se han empleado sinónimos o cambios de estructura.

Según catedráticos y altos cargos de distintas universidades consultadas por Servimedia, resultados "por debajo de un 15% suelen considerarse correctos", por lo que la tesis de Sánchez no estaría considerada como robo de la propiedad intelectual, según informa '20Minutos'.

La herramienta Turnitin (utilizada en la Universidad de Oxford) ofrece servicios, principalmente a institutos y universidades, para detectar el plagio académico y la utilizan más de 30 millones de estudiantes en 15.000 instituciones y 140 países, según la propia plataforma.

Este software presenta un inconveniente, y es que los textos quedan registrados en una base de datos privada de una empresa con fines comerciales, lo que podría suponer una violación de los derechos de autor. Además, este programa ha sido criticado porque, a través de 'WriteCheck', los alumnos pueden comprobar si su trabajo pasa los filtros de Turnitin antes de presentarlo y previo pago.

En cuanto a PlagScan, de origen alemán y de referencia en Europa, actúa en cuatro idiomas con clientes de todo el mundo y dispone de la confianza de mas de 1.500 organizaciones y de más de 1.200.000 estudiantes, según informan en su página web.

En este caso, la herramienta ofrece la opción de que el documento permanezca o sea borrado de su base de datos y se ajusta a las regulaciones europeas en esta materia.

Mientras tanto, todos continúan a la espera de que Casado se pronuncie al respecto de su máster, del cual el presidente del PP aseguró que está "muy tranquilo" sin dar más explicaciones.