El Gobierno y Podemos pactan quitar al Senado la posibilidad de vetar la senda de déficit

Modificarán la Ley de Estabilidad Presupuestaria para que se vote solo en el Congreso y evitar la mayoría absoluta del PP en la Cámara Alta.

Foto de archivo de la nueva ministra de Hacienda, María Jesús Montero
La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, encabezó la delegación del Ejecutivo
Julio Muñoz / Efe

Gobierno y Unidos Podemos mantuvieron en la noche del miércoles una reunión que se prolongó por espacio tres horas y en la que acercaron posturas de cara al apoyo de la formación morada a la senda del déficit y a los próximos presupuestos. La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, encabezó la delegación del Ejecutivo, mientras que Pablo Echenique hizo lo propio con la de la formación que lidera Pablo Iglesias.

Unidos Podemos puso sobre la mesa una subida de impuestos (a rentas altas, empresas, tecnológicas o bancas) y una relajación de la rebaja del déficit, que la Unión Europea ya ha suavizado en 6.000 millones. Otro tema en la negociación fue la ley de estabilidad presupuestaria. Según comunicó la formación morada tras el encuentro, "arrancó" al Ejecutivo una modificación de esa norma para eliminar el veto en el Senado del PP, donde goza de mayoría absoluta. Es un tema que, según Podemos, han hablado Pedro Sánchez y Pablo Iglesias en estos días.

Pablo Echenique, explicó tras la reunión que su formación ha acordado con el Gobierno la modificación de la Ley de Estabilidad Presupuestaria para evitar que el Senado pueda vetar la aprobación de la senda de consolidación fiscal propuesta por el Ejecutivo.

El acuerdo implica la eliminación del artículo 15 de la mencionada ley para que los objetivos de estabilidad presupuestaria solo sean votados por el Congreso, sin pasar después al Senado, de forma que se evite la mayoría absoluta que el PP tiene en la Cámara Alta, según han concretado desde Podemos.

"Se elimina así la última palanca de poder que le queda al PP referente a los presupuestos generales del Estado, que es la posibilidad de vetar la senda de déficit (...) con una mayoría absoluta espuria que no se corresponde con la fuerza electoral del PP", ha afirmado Echenique en declaraciones remitidas a los medios de comunicación tras la reunión de esta noche con el Gobierno.

Echenique ha explicado que la reforma se hará lo antes posible porque tiene que ser anterior a la llegada de nuevo al Congreso de la senda de estabilidad para el periodo 2019-2021 que el Gobierno tiene previsto aprobar otra vez en el Consejo de Ministros del viernes.

En opinión de Podemos la reforma se podría hacer mediante un decreto ley, aunque este punto no se ha concretado durante una reunión en la que ha habido un "interesante debate jurídico" al respecto.

Fuentes del Ministerio de Hacienda se han limitado a confirmar que ha habido avances en la negociación, pero no han querido concretar los contenidos tratados.

La derogación de la Ley de Estabilidad Presupuestaria era uno de los requisitos planteados por Unidos Podemos al Ejecutivo a cambio de su apoyo a la senda de estabilidad 2019-2021, algo a lo que se negó el Gobierno porque lo entendía como una ruptura con Bruselas.

Finalmente se ha optado por una reforma parcial después de que en los últimos días el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, hayan estado hablando de este asunto, según ha confirmado Podemos.

En el marco de la negociación, que seguirá en los próximos días, Echenique ha dicho que también se ha avanzado en un principio de acuerdo para eliminar el copago farmacéutico y para actualizar las pensiones de 2018 y 2019 conforme al IPC.

Para 2018 este acuerdo supondría el abono de una paga única a comienzos de 2019 que compense la desviación de la subida de las pensiones de este año respecto a la inflación.

"Somos relativamente optimistas con este punto. Es fundamental que la gente de nuestro país note los acuerdos en sus hospitales, escuelas y en sus bolsillos", ha señalado Echenique.

No obstante, ha señalado que todavía quedan muchas medidas por detallar, como las relativas a la dependencia, la educación, la sanidad, las políticas sociales de los ayuntamientos y la propia sostenibilidad del sistema de pensiones.

El Gobierno socialista y la coalición de izquierda quieren entenderse, pero sobre los primeros pesa la presión de Bruselas y sobre los segundos la necesidad de no quedar desplazados ante el electorado de izquierda por un Pedro Sánchez y un partido socialista en ascenso en las encuestas. Esta tensión se dejó entrever en la reunión en algunos momentos, en la que, según trascendió durante la mismas, sí se produjeron avances, al menos, para mantener los contactos en el tiempo.

El acuerdo con Unidos Podemos es un primer paso indispensable para que el Gobierno reúna de nuevo la frágil mayoría que derribó a Mariano Rajoy y llevó a Pedro Sánchez a la Moncloa. En caso de darlo, aún debería de convencer a las fuerzas independentistas.

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