La ministra de Política Territorial, Meritxell Batet, ha anunciado este miércoles la elaboración y presentación de una ley de medidas urgentes para devolver a los ayuntamientos las competencias que les fueron recortadas durante la crisis con la Ley de racionalización y sostenibilidad de la administración local de 2013.

En su comparecencia a petición propia ante la Comisión de Política Territorial del Congreso, para exponer las líneas generales de su departamento, ha considerado "desproporcionado" el "ataque" que sufrieron los ayuntamientos por parte del Gobierno del PP durante la crisis.

Un "ataque" que, a su juicio, tuvo su máxima expresión con la conocida como reforma local, que redujo "enormemente" el ámbito de autonomía de los municipios "asfixiando su capacidad económico-presupuestaria para abordar servicios y proyectos públicos".

Por eso, una de las primeras medidas que abordará su departamento será la elaboración de un proyecto de ley de medidas urgentes para el gobierno local, con un texto estrictamente limitado a modificar los artículos competenciales "hurtados" de la Ley de Bases y que suavice la configuración y efectos de la regla de gasto impuesta a los entes locales.

Batet ha dicho ser consciente de que el mundo local necesita una reforma en profundidad, pero también cree que no hay tiempo de abordar una tarea tan amplia y que no se dan las condiciones políticas para facilitar el consenso.

El proyecto de ley de medidas urgentes recuperará competencias de los ayuntamientos y permitirá que los municipios con superávit presupuestario puedan dedicarlo no sólo a gastos de inversión, sino también a la mejora de los servicios públicos esenciales para los ciudadanos.

La ministra también ha avanzado su intención de convocar de "modo inmediato" a las alcaldesas de Madrid y Barcelona, para poner en común las prioridades de colaboración.

Porque las grandes ciudades son protagonistas políticas "de primer" orden y su potencial no puede desaprovecharse o limitarse a un "bloqueo de sus iniciativas" desde el Gobierno, sino que hay que impulsar la colaboración específica con estos entes locales.

Batet ha afirmado que retomar la cooperación con el mundo local desde el reconocimiento de su autonomía es "una prioridad" y una "justicia", porque " solo desde el respeto al Gobierno local conseguimos democracia".

Además, ha mostrado su voluntad de volver a disponer de instrumentos de colaboración económica con los municipios, prestando una especial atención en su distribución a los de menos población y recursos, lo que ha enlazado con la labor de la comisionada para el reto demográfico, que pasa a depender de este ministerio.

Según ha subrayado, la inmensa mayoría de los municipios no tienen problemas de alcantarillado o suministro de agua, pero sí de acceso a internet o de movilidad, que deberán ser líneas de trabajo a atender con la nueva colaboración económica.